90 años de Trabajo Social UC: encuentro abordó área clínica como un desafío para la disciplina

¿Cómo se desenvuelve un trabajador social en el ámbito clínico? Esta fue una de las respuestas que se buscó esclarecer en el seminario internacional “Trabajo Social Clínico. Expresiones de la Intervención Cultural”, encuentro que contó con representantes gubernamentales, académicos de la Escuela de Trabajo Social UC y expertos de University Texas of Austin.

El encuentro tuvo un carácter simbólico, como primera actividad masiva del año que conmemora el aniversario 90 de la disciplina en la UC, una de las carreras más antiguas de nuestra institución. “La Escuela de Trabajo Social ha ido avanzando a un ritmo propio de la disciplina. Una de nuestras formas de consolidación ha sido contar con una planta académica doctorada. Todas las decisiones que hemos tomado como escuela están vinculadas a problemas públicos y sus soluciones, es parte de nuestro sello”, apuntó la directora, Carolina Muñoz.

Sobre los desafíos que se aproximan, la académica y trabajadora social, explicó que el área clínica será fundamental. Entre los cambios que están introduciendo está la modificación de la malla curricular, que apunta hacia especialidades como la mencionada y también otros campos como intervenciones socio jurídicas, diversidad sexual, discapacidad, vejez, sustentabilidad, responsabilidad social empresarial y convivencia escolar.

“Los programas de Trabajo Social hoy no entregan formación específica para dar herramientas a personas que enfrentan situaciones críticas”, explicó Muñoz, quien puntualizó sobre tres ejes claves hacia el futuro: una malla con las especialidades, la creación de un magíster en Trabajo Social Clínico para intervenciones más terapéuticas y programas de educación continua para habilidades clínicas.

Estados Unidos como punto de comparación

Entre los expositores del seminario estuvo el decano de Trabajo Social de la University Texas of Austin, Luis H. Zayas, quien se refirió a la malla de la carrera en su institución y a las áreas de incidencia que tiene la disciplina en Estados Unidos.

El académico explicó que, si bien la labor del Trabajo Social se ha expandido en el contexto urbano, las áreas rurales están descuidadas. Sobre la formación en el territorio latinoamericano versus el norteamericano, Zayas explicó que eran similares, pero que ellos consideran más horas de internado.

Destacó, además, la importancia de formar a profesionales capaces de afinar el “tercer oído” a la hora de ayudar a quienes lo necesitan. Con esto se relaciona el trabajo social clínico, apuntó y agregó que el énfasis está puesto en el área de salud mental. Otros ámbitos que atienden son escuelas, adicciones, niños y familias y militares.

Añadió que un área nueva en que se está especializando la disciplina en Estados Unidos, es la deportiva, pues hay muchas personas que se dedican a este ámbito, que sufren depresión y otros trastornos de salud mental.

Sobre la formación de posgrado, señaló que algunas herramientas que enseñan son metodologías para role play, simulaciones de casos y temas como consejería de parejas, neurobiología en la práctica del trabajo social, trastornos psiquiátricos, duelo e intervención en crisis.

Adicionalmente, enfatizan en herramientas como las entrevistas motivacionales, terapia breve centrada en la solución, terapia cognitiva conductual, evaluación y tratamiento de poblaciones traumatizadas, teorías y métodos de intervención de familia y tratamiento a niños abusados.

Finalmente, Zayas explicó que las prácticas para los trabajadores sociales de su universidad se basan en la evidencia, con implementación de terapias empíricas, depresión, ansiedad y estrés postraumático, entre otros contextos de intervención y trabajo.

*Este encuentro también contó con la experticia de Ruben Parra-Cardona (académico de U. Texas of Austin); Verónica Monroy, subdirectora de Centro Corporativo UC y jefa de gabinete de Sename; y las profesoras de Trabajo Social Olaya Grau y Karla González.