Columna del rector: El aporte del emprendimiento
El Concurso Brain Chile permite transferir el conocimiento que se produce en la academia a la sociedad, y entrega a los participantes la oportunidad de formarse en el desarrollo de habilidades y obtener las herramientas para realizar un emprendimiento de base científico-tecnológica. Lo relevante, según el rector, es generar las condiciones para articular una cultura de innovación y emprendimiento en beneficio del país.
Junto a esta grave crisis social, la crisis económica que se avecina será muy significativa. Para enfrentarla, junto con estimular las confianzas y el apoyo a las empresas pequeñas y medianas, se requiere estimular y acelerar diversos emprendimientos de base científico-tecnológica. Así lo señala el rector Ignacio Sánchez en una columna que recoge el vespertino La Segunda en su edición de este lunes 18 de noviembre. Dice que el Concurso Brain Chile busca esto, hace unas semanas se desarrolló una nueva versión con gran calidad de las propuestas. Se recibieron cerca de 300 proyectos, con representación de ocho universidades chilenas y otras de Latinoamérica. Las principales industrias involucradas en las propuestas fueron Salud, Innovación en Servicios, Medio Ambiente, Agricultura, Energía, TIC y Biomedicina.
Luego, la autoridad comenta que en sus diferentes etapas, los equipos recibieron orientación para desarrollar sus prototipos y modelos de negocios, con instructores técnicos que les brindaron apoyo en sus proyectos. Este concurso permite transferir el conocimiento que se produce en la academia a la sociedad. El Centro de Innovación UC Anacleto Angelini, la Escuela de Ingeniería y la Dirección de Transferencia y Desarrollo de la UC, junto al trabajo conjunto con el Banco Santander, han apostado por este modelo para impulsar el emprendimiento.
Para el rector Sánchez, el concurso implica una cadena virtuosa ya que produce una sinergia de las capacidades y habilidades de los diferentes actores. A través de Brain Chile entregamos a los participantes “la oportunidad de formarse en el desarrollo de habilidades y de obtener las herramientas para realizar un emprendimiento de base científico-tecnológica”, precisa. Estos proyectos requieren de pruebas de concepto y de propuestas para participar en una incubadora o capital semilla.
Los prototipos incluyeron el procesamiento de sonidos de origen biológico para la acuicultura; reciclaje de desechos en la construcción; el agua de mar como insumo para los motores de las embarcaciones; un examen clínico para identificar el patógeno de la infección cutánea; un sincronizador respiratorio no invasivo para lactantes con apnea central; un dispositivo magnético dentario para tratamientos de ortodoncia; entre otros emprendimientos.
El Concurso puede levantar nuevas empresas tecnológicas y mercados que impacten el desarrollo económico y social del país. En esta oportunidad, las iniciativas premiadas fueron aquellas que van a permitir atraer una mayor inversión. “Todos estos esfuerzos se orientan a transferir la investigación a soluciones para las necesidades de las personas y la sociedad. Lo relevante es propiciar la interacción entre las empresas, las universidades, el estado y la sociedad civil”, apunta Sánchez. Agrega que es necesario generar las condiciones para articular una cultura de innovación y emprendimiento en beneficio del país. “Brain Chile va en ese camino y la actual situación del país lo hace aún más necesario”, concluye.