¿Cómo concebir la ética del cuidado en Enfermería para contar con mejores profesionales?
Una jornada destinada a tutores clínicos fue realizada recientemente en la UC, en la instancia se profundizó sobre ciertas nociones para estimular a estos profesionales en la labor de formación de excelencia. Estimular el compromiso con el cuidado y respetar las decisiones de los pacientes fueron algunas de las recomendaciones.
photo_camera Archivo UC
“El rol del tutor clínico en la formación de profesionales de excelencia” fue el nombre de una actividad realizada recientemente, donde académicas del área presentaron diversas definiciones sobre cuidado y dieron a conocer su experiencia en el campo de las tutorías. María Dolores Cunill, subdirectora de Enfermería en Red de Salud UC Christus, manifestó que “está en nuestra esencia transmitir el conocimiento a nuevas generaciones y queremos destacarnos a nivel nacional a través de una mayor investigación y desarrollo”.
Por su parte, la directora de pregrado de la Escuela de Enfermería UC, Luz María Herrera, destacó la importancia de la investigación en el área, pues “sin academia, la Escuela de Enfermería y la red de salud no podemos formar enfermeras, ya que somos un cuerpo y estamos unidos por una misión común”.
Cuidado y compromiso
Eliana Horta, docente del College of Nursing de la Universidad de Nueva York realizó una presentación en la que destacó la importancia de los tutores clínicos en la formación de la disciplina. La académica se refirió a diversas nociones que implica el cuidado y cómo este se expresa en la práctica clínica profesional. En términos concretos, apuntó, el cuidado “tiene como meta contribuir a la calidad de vida, seguridad, bienestar de personas y grupos sociales y esta es la contribución de enfermería”.
En estos términos, Horta aseguró que los profesionales de la salud deben apuntar hacia el respeto y la honra de la libertad de las personas al momento de elegir. Así, señaló, “la esencia de la ética de enfermería viene de las raíces del cuidado, donde la cooperación es el escenario moral de la práctica, que persigue virtud y excelencia”.
La académica agregó que un profesional de excelencia debe ser empático y “capaz de ser presencia verdadera, libre y responsable, sensible y respetuoso de la condición humana”, esto en el entendido de que cada persona es un ser particular.
Horta también analizó algunos desafíos pendientes a nivel de ejercicio de la disciplina y llamó a “reconsiderar lo que significa la supervisión clínica, ya que lo que significa cuidar en el contexto de enfermera no solo son reglamentos legales, sino que también competencia y liderazgo clínico”. Al mismo tiempo la profesora recalcó que la unión entre autonomía profesional y contexto ético es indisoluble.
INFORMACIÓN PERIODÍSTICA
Violeta Bustos Vaccia, periodista, vsbustos@uc.cl
