Más de 1.000 estudiantes vuelven cada semana a la UC
Los alumnos y alumnas, en conjunto con docentes, llegan a concretar actividades prácticas fundamentales para cerrar el segundo semestre. Gracias a los resguardos y al compromiso de la comunidad UC, las actividades se han desarrollado de manera exitosa, sin brotes de COVID-19.
Como una fábrica a todo motor describe el profesor Francisco Chateau el ambiente de cierre de semestre del Laboratorio de Modelos y Prototipos del campus Lo Contador en un año regular. “Ruido, polvo, gritos, gente entrando y saliendo. Es bonito”, recuerda el docente. Pero muy distinto de lo que se ha vivido en las últimas semanas con el retorno de los estudiantes a este lugar, que normalmente puede recibir hasta a 50 alumnos y alumnas al mismo tiempo, y que actualmente no supera los 15, permitiendo de este modo el distanciamiento social necesario para cumplir el protocolo por COVID- 19.
Con más o menos dificultades, tanto el profesor como sus estudiantes están contentos de poder volver a trabajar en este espacio. “Ha sido muy positivo estar acá, y era muy necesario también. Hemos tenido actividades y correcciones trabajando en el taller. Las clases a distancia son una cosa, pero es muy diferente cuando tienes correcciones en persona, se avanza mucho más”, comenta Fabián Torres, quien está trabajando en su proyecto de título de Arquitectura y en investigación para su tesis de magíster.
“Desde el punto de vista de la experiencia docente y del taller, estaba llegando un momento bien difícil de sostener en el tiempo, porque después de varios meses con trabajo remoto, la parte experimental del taller ya se hacía necesaria. Si hubiésemos pasado más tiempo sin vernos, habría decaído la capacidad de los estudiantes de hacer cosas”, asevera Chateau.
La experiencia del Laboratorio de Modelos y Prototipos de Lo Contador se puede extender a otras carreras y experiencias que en las últimas seis semanas se han ido desarrollando en los campus de Santiago, cada una con sus particularidades y diferencias. Actualmente el único campus que no ha retomado ninguna actividad presencial es la sede de Villarrica, pero ya se están tomando acciones para retomar algunas actividades, en la medida en que la comuna avanza en los pasos de desconfinamiento.
Gracias a la observancia de los protocolos y la responsabilidad demostrada por los miembros de la comunidad UC, semanalmente cerca de 1.400 estudiantes han podido visitar los campus sin que se hayan detectado contagios de COVID-19.
"Las clases a distancia son una cosa, pero es muy diferente cuando tienes correcciones en persona, se avanza mucho más” - Fabián Torres estudiante de magíster
“Se notaba que los estudiantes tenían ganas de volver y practicar”
Otra carrera que se ha visto beneficiada con la posibilidad de volver parcialmente es Kinesiología, ubicada en el campus San Joaquín. Cerca de 40 docentes van cada tres semanas al edificio de Ciencias de la Salud, rotándose con las carreras de Fonoaudiología y Nutrición y Dietética. Ahí realizan actividades prácticas junto a sus estudiantes en laboratorios, salones y espacios comunes.
Según Javiera Fuentes, directora de carrera, el retorno a clases presenciales era fundamental: “Sabemos lo necesario que es el desarrollo de habilidades prácticas y clínicas en la formación de los kinesiólogos. Es una preocupación constante del cuerpo docente que los estudiantes puedan practicar y desarrollar habilidades que resultan muy difíciles de hacer online”.
Siendo una escuela “90% práctica”, como dice la directora, han buscado distintas formas de innovar en la docencia, como enseñarles a sus estudiantes a hacer los ejercicios prácticos con familiares o personas de su mismo hogar, con fantomas caseros, o incluso con ellos mismos. También aprovecharon la tecnología, instalando sistemas de transmisión en laboratorios para poder hacer demostraciones prácticas en vivo a quienes siguen los cursos desde sus casas, mientras que un grupo asiste presencialmente.
Pero en los cursos prácticos, las actividades presenciales son especialmente importantes: “Se notaba que los estudiantes tenían ganas de volver y practicar, en nuestra carrera es importante lo procedimental: tomar a tu paciente, moverlo, trabajando entre ellos”, explica el profesor asistente del curso Kinesioterapia Músculo-Esquelética, Mauricio Delgado.
“Se notaba que los estudiantes tenían ganas de volver y practicar, en nuestra carrera es importante lo procedimental: tomar a tu paciente, moverlo, trabajando entre ellos” - Mauricio Delgado, profesor de Kinesiología
Menor aforo, autocuidado y protocolos
“Cada vez que entramos al campus hemos tenido que llenar el formulario de tamizaje, tomarnos la temperatura, pasar por torniquetes, que es algo nuevo en el ingreso. A diferencia de semestres anteriores, no podemos compartir los microscopios y herramientas sin desinfectarlos antes. Considerando eso, la experiencia ha sido muy buena, me alegra mucho poder volver a los laboratorios porque es algo muy útil de acompañamiento a la cátedra”, comenta Alonso González, estudiante de tercer año de Química y Farmacia, al salir de uno de los laboratorios de la Facultad de Ciencias Biológicas, en Casa Central.
La observancia de los protocolos y medidas de seguridad por parte del estudiantado es un aspecto que los y las docentes destacaron transversalmente.
Alejandra Bendel, directora de la carrera de Arte y profesora del curso Acuarela, comentó que al menos en campus Oriente “sin lugar a duda, los estudiantes han mantenido una gran responsabilidad (…) están muy consciente de los cuidados que se deben tener al interior de un taller”. Eso ha permitido perpetuar el formato, y continuar con actividades que se hacían necesarias para cerrar talleres y cursos.
“Reconozco el gran trabajo que han realizado los docentes para poder programarse en las actividades que están pendientes del primer semestre, sumadas a las actividades del segundo semestre, y también nuestros estudiantes y el esfuerzo que están realizando”, señaló la directora.
Para Gonzalo Pizarro, quien dirige la Dirección Académica de Docencia de la Vicerrectoría Académica, la apertura de los campus ha permitido a las diferentes unidades académicas realizar actividades prácticas necesarias para alcanzar los objetivos de aprendizaje propuestos en los cursos.
“Estas actividades habían quedado pendientes durante la época de cuarentena y las diferentes unidades académicas reorganizaron los cursos de manera de aprovechar el tiempo de cuarentena con actividades teóricas y postergaron las prácticas para el final. Ahora que los campus están abiertos esto se ha podido realizar. Las unidades han sido muy responsables en esta reorganización y también en la forma en que están realizando las actividades, cumpliendo con las disposiciones sanitarias que la universidad ha implementado”, comentó.
"Las unidades han sido muy responsables en esta reorganización y también en la forma en que están realizando las actividades, cumpliendo con las disposiciones sanitarias que la universidad ha implementado” - Gonzalo Pizarro, director de Docencia de la Vicerrectoría Académica.
Durante las próximas semanas, las actividades presenciales seguirán desarrollándose con cuidadosas medidas de seguridad e higiene. Esto también contempla actividades de acogida a los novatos y novatas UC, las que están planificadas hasta fines de enero. En tanto, el escenario del retorno parcial para el primer semestre de 2021 depende fuertemente de la evolución de las condiciones sanitarias, por lo que aún no se han anunciado protocolos para este período.