Más de 3 millones de personas siguieron la transmisión del eclipse lunar de Astrofísica UC
Un equipo liderado por el profesor Thomas Puzia y conformado por estudiantes de pre y postgrado, y comunicadores de la universidad, estuvo a cargo de transmitir el eclipse total de luna conocido como “luna de sangre”, permitiendo al público ver impresionantes imágenes y aprender del fenómeno.
Desde las cinco de la tarde del domingo 15 de mayo hasta las cuatro de la mañana del lunes 16, un equipo del Instituto de Astrofísica UC estuvo instalado a 3 mil metros sobre el nivel del mar en el centro de esquí Valle Nevado, en la Región Metropolitana, para transmitir un evento único: el eclipse total de luna, más conocido como “luna de sangre” por el particular color rojizo que esta adquiere durante el “peak” del fenómeno.
El grupo, liderado por el académico y jefe de Difusión de Astrofísica, Thomas Puzia, estuvo conformado por los estudiantes: Baltasar Luco y Gabriela Monasterio, de quinto y cuarto año de Astrofísica respectivamente; Tuila Ziliotto, estudiante del Magíster en Astrofísica proveniente de Brasil y Laura Martínez, estudiante del Doctorado en Astrofísica proveniente de Colombia, además de un equipo de comunicaciones.
Su labor fue transmitir en vivo el eclipse lunar, explicando de manera simple las distintas fases del fenómeno y respondiendo las preguntas del público que llegaban a través del Canal de YouTube del Instituto. Gracias a esta transmisión, más de tres y medio millones de personas pudieron seguir el eclipse a través de los canales CNN Chile, Megavisión y Canal13, además de cerca de 1 millón visualizaciones provenientes de distintas partes del mundo a través de varios canales de YouTube y Facebook.
Revisa las increíbles imágenes de la transmisión del eclipse total de luna realizada por
el equipo de Astrofísica UC.
Además de la transmisión, también se realizaron mediciones fotométricas visuales y fotográficas con telescopios, binoculares y un par de cámaras acopladas a estos. También se efectuaron mediciones de espectros de la superficie lunar con el objetivo de analizar su composición química y las huellas de vida en la transmisión de la Tierra. Un gran despliegue que desafió incluso las bajas temperaturas, que descendieron los cero grados.
La jornada sin duda fue muy enriquecedora. “Fue una experiencia totalmente gratificante, poder lograr ver los frutos del trabajo es muy reconfortante. Personalmente fue fascinante apreciar el eclipse lunar total, un evento astronómico sumamente bello. En adición, fue gratificante contar con el buen equipo que participó”, afirma Baltasar Luco.
“Como astrónoma, mucha gente cree que paso observando el cielo nocturno, cuando en realidad mi trabajo se desarrolla frente a un computador, escribiendo códigos la mayor parte del tiempo. La experiencia de haber participado en la transmisión del eclipse lunar fue, para mí, un momento de reconexión con nuestro cielo nocturno, dándome el privilegio de observar el eclipse en un lugar con poca contaminación lumínica y de poder transmitir las imágenes, junto con la información científica, para que otras personas las disfruten”, cuenta Tuila Ziliotto. “Espero que las imágenes y la información que difundimos el domingo pasado, también hayan despertado la curiosidad e inspirado al público a estudiar astronomía, y que también nos hagamos más conscientes de la importancia de preservar el cielo nocturno”, agrega.
Como dice Gabriela Monasterio: “Fue un verdadero privilegio que el profesor Thomas Puzia me haya invitado a presenciar esta experiencia con el equipo. Pudimos estudiar harto sobre el eclipse y compartir nuestro amor por la ciencia. Profesionalmente puedo decir que esta experiencia me hizo sentir por primera vez como una astrónoma de verdad, a veces a uno se le olvida por qué está estudiando esta carrera tan difícil y olvidas el foco, pero son estas experiencias y estos grupos humanos los que te hacen sentir que tomaste una decisión correcta al elegir la carrera. Aprendí muchísimo sobre el eclipse y sobre otras cosas, como telescopios y cámaras. Espero volver a tener experiencias similares”.
Como agrega Laura Martínez: “Personalmente me encanta trabajar con telescopios, me emociona y me deslumbra mirar la luna, su superficie, las manchas del sol, los planetas y sus satélites. Es aún más emocionante cuando compartes ese sentir con más personas y este fue el caso con el equipo de Astrofísica y remotamente con las personas que nos acompañaron minuto a minuto en la transmisión del eclipse. Es bastante satisfactorio poder compartir un poco de tu conocimiento, lograr despertar la curiosidad de miles de personas en temas asociados a la astronomía”.
Y añade: “Profesionalmente siempre es un reto el lograr transmitir de manera clara y llamativa, pero con la rigurosidad que requiere, el conocimiento científico. Tuve la oportunidad de iniciar este camino de la divulgación durante mi pregrado como estudiante de Física y considero que experiencias como esta sin duda enriquecen mi proceso y me permiten exigirme un poco más. Por último, considero que las habilidades de comunicación y el manejo de instrumental astronómico son herramientas que fortalecen mi perfil como astrofísica y me permitirán una mayor proyección profesional”.
Esta no es la primera experiencia de este tipo para la mayoría del equipo, de hecho, ellos conforman el grupo “Cazadores de eclipses”, transmitiendo también el eclipse lunar del 19 de noviembre de 2021 y el eclipse parcial de sol del 30 de abril pasado. Asimismo, el Instituto de Astrofísica transmitió los eclipses totales de sol del 14 de diciembre de 2020 desde Villarrica y el del 2 de julio de 2019 desde el valle del Elqui, realizando una importante de divulgación de la ciencia acercando estos eventos astronómicos a la población.