Cómo la presidencial interfirió en las relaciones personales
![Foto de Paula Luengo](/site/assets/files/15432/paula_luengo2.384x400.jpg)
Gonzalo Winter (34) jamás imaginó la respuesta que le dio su padre cuando le preguntó por quién votaría para presidente, semanas antes de la primera vuelta del 21 de noviembre. Si bien sabía que históricamente él había sido de centroderecha, y que en las últimas elecciones había votado siempre por Sebastián Piñera, Winter cuenta que a su padre nunca le había interesado mucho la política. Esas preferencias electorales eran, en general, más por lo económico que por lo político. Por eso, el diputado reelecto por Convergencia Social dice: “Tenía la esperanza de que al menos votaría por Sebastián Sichel”.
No fue así. La tarde de mediados de octubre en que lo visitó en su casa ubicada en Colina, Jaime Winter (68), un economista que trabaja en el rubro inmobiliario, le dijo que había decidido votar por José Antonio Kast.
Fue entonces que Winter hijo, por primera vez, decidió abordar la situación de manera distinta a como siempre lo habían hecho.
Tensiones familiares
Las dos opciones presidenciales que van a la segunda vuelta de hoy han despertado tensiones políticas que han ido mucho más allá del terreno partidista y de aquellos que permanentemente han estado inmersos en este ambiente. El escenario hoy es distinto. Por primera vez desde el retorno a la democracia, el domicilio político de ninguna de las candidaturas que van al balotaje está en el centro. Eso, a ojos de los expertos, ha calado hondo en las discusiones de los círculos más íntimos de los ciudadanos. Para Paula Luengo, psicóloga y académica de la Facultad de Psicología de la UC, “hay un contexto en que el escenario político marca un punto de inflexión bastante importante en términos de radicalización de las opciones. Eso es una polarización que se percibe en la cotidianeidad y de la que todos están hablando”. (...)
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