Contemplar a Dios en la naturaleza
El Dios creador nos regaló un mundo en armonía y equilibrio, para que viviéramos en él y cuidáramos de todas sus creaturas. Nos mostró su gran amor, al confiarnos la administración de su gran obra, pero no hemos sido capaces de responder a lo encomendado.
La naturaleza, la casa que debemos cuidar, nos asombra y nos inspira a reflexionar. En ella podemos encontrar un mensaje divino. El reflexionar nos permite cada día valorar aún más la creación del Señor. Es nuestra casa común y debemos cuidarla. En la carta encíclica Laudato si’ del Santo Padre Francisco refiriéndose al cuidado de la casa común, nos llama a proteger la naturaleza desarrollando un modelo de producción sostenible e integral compartiendo como familia nuestra existencia y la preocupación por la mantención no destructiva de nuestro planeta.
¿Y qué le estamos haciendo a nuestra casa común? Estamos ejerciendo acciones humanas que destruyen la vida de los seres que la habitan, a través de un uso irracional y no sustentable de los recursos biológicos. La pérdida de la biodiversidad es un hecho innegable; pensemos, por ejemplo, por un instante qué pasaría si desaparecieran las abejas productoras de miel. Ellas son responsables de la polinización de una gran cantidad de frutas, verduras y varios otros cultivos utilizados cotidianamente como parte de nuestra dieta alimenticia. En su ausencia, la reproducción de las plantas no podría llevarse a cabo y la producción de alimentos se vería afectada. Qué importante es darse cuenta de cómo la extinción de una sola especie puede cambiar nuestra calidad de vida y subsistencia.
No podemos olvidar que, contribuyendo aún más a la degradación de la naturaleza, está el aumento significativo de la temperatura, por efecto de la acumulación de anhídrido carbónico en la atmósfera, lo cual hace que la corteza terrestre quede transformada en un perfecto invernadero, sin dejar escapar las altas temperaturas.
La última exhortación apostólica del Santo Padre Francisco, Laudate Deum, a todas las personas de buena voluntad, sobre la crisis climática (octubre de 2023) nos indica que "es indudable que el impacto del cambio climático perjudicará de modo creciente las vidas y las familias de muchas personas. Sentiremos sus efectos en los ámbitos de la salud, las fuentes de trabajo, el acceso a los recursos, la vivienda y las migraciones forzadas". (…)
Seguir leyendo "Una reflexión semanal" launch