Infraestructura deficiente en Chile y fenómenos naturales
La Región Metropolitana fue afectada por un sistema frontal con características particulares: vientos de hasta 120 kilómetros por hora que se registraron el día viernes y un masivo corte de luz producto de las condiciones climáticas. Hasta las siete de la mañana de este lunes, a nivel nacional todavía habían 398.453 clientes sin suministro de energía eléctrica, y solo la Región Metropolitana concentra 224.861 personas afectadas por la situación, de acuerdo con el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred).
Estas críticas condiciones climáticas no solo ocasionaron un masivo y prolongado corte del servicio eléctrico, sino también generaron complicaciones en los servicios de telecomunicaciones en las regiones de O’Higgins, Biobío, La Araucanía y Los Ríos. En cuanto a la Región Metropolitana, la Subsecretaría de Telecomunicaciones informó que 1.448 fueron los sitios afectados en la zona.
El invierno del 2024 ha estado marcado por la presencia de distintos fenómenos naturales, causando pérdidas materiales y humanas; sin embargo, en esta ocasión las consecuencias apuntan hacia otra dirección: la infraestructura y la preparación del país ante estos eventos naturales.
La preparación de Chile
Roberto Moris, académico del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Universidad Católica, apunta que la preparación del país ante este tipo de fenómenos de la naturaleza “parece ser insuficiente (…) Esto sugiere que la infraestructura y los sistemas de respuesta no están completamente preparados para manejar eventos climáticos extremos”.
Para el académico existen ciertos factores que influyen, en los que destacan los siguientes:
• Infraestructura inadecuada: “La infraestructura de drenaje en muchas áreas de Santiago es insuficiente para manejar grandes volúmenes de agua”.
• Urbanización y pavimentación: “La expansión urbana ha reducido la capacidad del suelo para absorber agua, aumentando el riesgo de inundaciones”.
• Topografía y clima: “Santiago está en un valle rodeado de cerros y montañas, lo que favorece la acumulación de agua durante lluvias intensas”.
• Mantenimiento insuficiente: “La falta de mantenimiento y actualización de las redes de drenaje existentes”. (...)