“La situación del mercado laboral es muy compleja"
-Este jueves el INE entregó los datos de empleo y has sostenido que no debemos naturalizar una tasa de desempleo sobre el 8%. ¿Qué políticas públicas crees son esenciales para reducirla?
-Tenemos una tasa de desempleo de 8,7% y llevamos casi 2 años con una tasa de 8% o más. Entre enero de 2010 y febrero de 2020, la tasa de desempleo promedio fue de 6,9%. Faltan 278 mil empleos por recuperar. Luego, me parece que en 2 años se debería al menos haber intentado medidas pro empleo, como incentivos a la contratación y no al revés. Ahora, no hay mejor política generadora de empleo que el crecimiento económico y no se vislumbra un escenario favorable en el corto y mediano plazo.
-La orientación de la legislación laboral está aumentando los costos de contratación. ¿Qué efectos has observado en la creación de empleo formal debido a la ley de 40 horas y otros cambios normativos recientes?
-Es innegable que algunas medidas han encarecido la contratación de mano de obra. La identificación “causal” de los efectos de cada medida en el empleo es difícil de calcular porque ocurren simultáneamente y hay otros cambios ocurriendo también, como la gratuidad de la educación superior, PGU, entre otros. Sin embargo, es evidente que cuando un insumo productivo se encarece las empresas pueden sustituir parcialmente dicho insumo por otro, como el capital. Eso tiene un efecto en el empleo en el mediano y largo plazo. (…)
-¿Por qué crees que el aumento del salario mínimo y la PGU están afectando la participación en el mercado laboral, en jóvenes y adultos mayores?
-Es simple. El salario mínimo afecta a trabajadores menos calificados y muchos trabajadores jóvenes entre 18 y 24 años tienen poca calificación y experiencia laboral. Hoy el desempleo juvenil está en 21,4%, pero para las mujeres (en este segmento) alcanza el 23,4%. Es una tasa muy elevada y no se arregla por decreto, como intenta hacerlo el proyecto de ley que quiere establecer cuotas para emplear trabajadores jóvenes.
Por otro lado, la PGU significó un ingreso no-laboral para muchas personas con 65 años o más que antes no tenían. Un resultado de los modelos de oferta de trabajo es que un aumento en el ingreso no-laboral desincentiva la participación laboral y es lo que está ocurriendo con las personas de 65 o más años. (...)