Rector UC: “Sinovac quiere instalarse en Chile y fabricar en un año cerca de 60 millones de dosis”
El rector Ignacio Sánchez detalla los avances del laboratorio chino para levantar una planta productora de vacunas en el país: ejecutivos y científicos chinos preparan una nueva visita técnica. Así lo señaló la autoridad académica en entrevista que publica La Segunda este jueves.
No sabe hablar en chino, pero la seguidilla de reuniones que este último tiempo ha tenido el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, con los ejecutivos de Sinovac, al menos lo han hecho familiarizarse con saludos en ese idioma.
Ni Hao, dice sin problemas al iniciar las reuniones. “La verdad es que nos comunicamos en inglés, porque solo conozco tres o cuatro palabras en chino, muy básicas, al igual que ellos en español”, cuenta desde su oficina en la casa central del plantel universitario.
La última reunión con los ejecutivos y científicos chinos (en cuyo laboratorio se fabrica la vacuna Sinovac, la más masiva en nuestro país) fue la mañana de este lunes, de manera virtual.
Los planes originales eran otros. Ese día se reunirían de manera presencial -en el campus Lo Contador de la UC- la delegación china encabezada por el vicepresidente de Sinovac, doctor Weining Meng, con los equipos de la UC encargados de la vacuna china en Chile.
Pero el anuncio de la cuarentena en la Región Metropolitana cambió las cosas. “Quedaron con todo listo. Viajaban el viernes pasado para estar el lunes acá. Pero el jueves les contamos de la cuarentena, así que suspendieron el viaje”, cuenta.
El interés chino
El interés de Sinovac de instalarse en Chile con una planta productora de vacunas que alimente a toda la región ha intensificado la relación con la UC, donde esperan la pronta llegada de 4 a 6 científicos chinos que vendrán a conocer los espacios donde se instalarán en la universidad: “Esperamos que lleguen en julio o agosto, les destinamos espacios en el Centro de Innovación y unos laboratorios que ya tenemos instalados”.
El postergado viaje además tenía como fin visitar algunos espacios físicos para ver dónde podrían instalar la planta. “Santiago, Antofagasta, Puerto Montt son eventuales lugares. Querían tener conversaciones con el sector público y privado para avanzar en esta materia, así que el viaje se pospuso en uno o dos meses según evolucione la pandemia”, agrega.
“La vacuna no lo es todo”
Para muchos, Sánchez es uno de los principales responsables de que el 60% de los chilenos ya está vacunado contra el coronavirus. El médico –pediatra broncopulmonar– fue quien en julio del 2020 negoció directamente con los ejecutivos de Sinovac un acuerdo de compra de 60 millones de dosis en tres años.
Algo visionario si se piensa que esa vacuna hoy representa el 80% de la campaña de vacunación nacional contra el coronavirus. Explica que ya han llegado al país 16 millones de dosis de las 18 millones comprometidas para este año. “Pero la negociación final y acuerdos definitivos dependen del Ministerio de Salud, porque ese acuerdo lo traspasamos al Minsal y al Ministerio de Relaciones Exteriores”, cuenta.
–Con el 60% de la población con dos dosis, sigue un alto número de casos activos y fallecidos... ¿cómo se explica?
–Son varios factores. Y uno de ellos es que en esta segunda ola las variantes han tenido una importancia crucial. Y una de las más contagiosas, la P1 (brasilera) se ha diseminado mucho. El 70% de los casos en el hospital de la UC son de esta variante, que afectan mucho más a la población joven que tiene solo una dosis o simplemente no está vacunado. De cada 10 o 15 hospitalizados por covid, no más de uno tiene vacunación completa. Por lo tanto la vacuna, cualquiera que ésta sea, protege muy bien contra la enfermedad grave.
–Pero la efectividad de la Coronavac es menor que la de otras vacunas como Pfizer. Por lo tanto es más factible contagiarse y transmitir el virus si uno tiene Coronavac que si tiene Pfizer.
–Sí, es cierto, y es una de las claves de la diferencia con Israel, que cuando completó el 60% de población vacunada, las tasas de transmisibilidad del virus bajaron abruptamente. Si a eso le sumamos factores de hacinamiento, comportamiento social y la falta en seguir las indicaciones sanitarias, explican la situación actual. La vacuna no lo es todo, la vacuna es muy efectiva para enfermedades graves, pero menos efectiva para enfermedad leve, y por lo tanto, hay más transmisibilidad. Por eso, uno no se cansa de pedir más esfuerzos, aunque se entiende que todo el mundo esté muy cansado con esto.
¿Y la tercera dosis?
Casi toda la familia del rector ya está vacunada. Sus padres (de más de 80 años), su esposa Salesa y 6 de sus 7 hijos, ya que el menor de la familia (Emilio) está a punto de cumplir los 18 años y aun no entra en el calendario de vacunación.
“Al hijo que está en Dinamarca le tocó la vacuna Johnson y Johnson, a uno acá le tocó AstraZeneca y ya sabe que su segunda dosis será de Pfizer, varios recibieron Sinovac y a una hija doctora le tocó Pfizer. Pero casi todos vacunados ya”, dice.
Aunque habla casi a diario con sus padres, solo los ve por zoom, una vez a la semana. Lo mismo con sus hijos. “Los veo muy ocasionalmente. Es difícil esa distancia física”, admite.
"A nivel nacional antes de la pandemia teníamos 1.300 camas UCI (en el hosital UC) y hoy son más de 4.500. Imagine el esfuerzo que hay detrás”- Rector Ignacio Sánchez.
No está ejerciendo como médico, pero cada cierto tiempo va al hospital de la UC a hacer visitas médicas. “La idea es compartir con los equipos de salud, dar un apoyo presencial y motivacional a todos los equipos, porque han sido fundamental en todo esto. Piense que a nivel nacional antes de la pandemia teníamos 1.300 camas UCI y hoy son más de 4.500. Imagine el esfuerzo que hay detrás”, dice.
-¿Ya se está pensando en una tercera dosis de vacuna?
–Se está pensando, pero primero necesitamos saber cuánto dura la inmunidad de la actual vacuna. Los estudios que se están llevando a cabo en Chile y en el extranjero sobre esto nos van a ir dando las claves. Pfizer ya ha dicho que lo está evaluando. Nosotros estamos esperando los resultados finales del estudio de seguimiento de 2.300 voluntarios que partió en octubre pasado acá en Chile, acabamos de presentar la tasa de anticuerpos a 6 meses, la que es alta, pero no sabemos cómo variará los próximos meses. Esperamos en octubre de este año tener mayor claridad de la inmunidad al año de puesta la vacuna y sugerir si es recomendable o no una tercera dosis.
–Y la vacunación para el próximo año ¿es inevitable, no?
–Vacunarse nuevamente contra el coronavirus los que ya tenemos las dos dosis, diría que es una certeza. El tema es cuándo, no sabemos la fecha. Todo indica que va a tener que haber vacunación el próximo año. De hecho, el acuerdo comercial al que llegamos con Sinovac aseguró dosis para el 2022 y 2023, porque desde el inicio se previó que se iba a requerir vacunación en los próximos años.
–Una de las limitaciones de Coronavac es no ser reconocida en Europa ni EE.UU.
–Coronavac ya fue validada por la OMS, lo que es una certificación importante, y España también la reconoce. Algunas de estas vacunas entran dentro de variables más diplomáticas internacionales que sanitarias y la relación de China con Europa y Estados Unidos corre por otros canales, pero veo que en la medida que haya más información, será cosa de tiempo que sea aceptada en todas partes.
Vacuna reforzada
No ha dejado de ir a la Casa CentralCasa Central, pese a la pandemia. Cuando hay cuarentena lo hace tres veces a la semana. Pero si ya está en fase dos o más, prácticamente todos los días.
Ya no usa mucho su automóvil, ahora anda más en Metro. “Pero en hora no punta, porque viajan pocas personas y es muy expedito. Además, es menos complejo para quienes trabajan con uno y deben desplazarse de comunas que están en cuarentena”, cuenta.
“Se está pensando en una tercera dosis (...) En octubre esperamos tener mayor claridad”- Rector Ignacio Sánchez.
Uno de esos días, dice, se vio sorprendido. Iba subiendo las escaleras del Metro cuando alguien le empezó a gritar desde abajo. “Admito que al principio me asustó, porque venia solo, no había nadie más. Escuché ¡oiga, espere! Miré para atrás y me dijo ¿usted es el rector? Yo le respondí, algo temeroso, que sí. Entonces la persona subió corriendo, y era para agradecerme por la labor de la universidad en la vacuna. Fue muy gratificante”, dice.
Y aunque sabe que la vacuna facilita la gestión de la pandemia en Chile, advierte que queda mucho por hacer.
Por ejemplo, que ya se está trabajando en mejorar la vacuna actual para reforzar su eficiencia y responder a las nuevas variantes. El lunes, dice, en la reunión con la gente de Sinovac abordaron el tema: “Ellos comentaron que estaban perfeccionando su vacuna para las variantes, particularmente para la P1, y que había buena respuesta. Es muy posible que futuras vacunas tengan mejores resultados para proteger de enfermedad leve, que es lo que ayuda a cortar el contagio”, explica.
No fue de lo único que hablaron. También se avanzó en los detalles para la llegada de científicos chinos al país. Una de las razones que explica el interés de ellos de instalarse acá radica en los estudios que se han hecho en Chile en torno a la efectividad de la vacuna. “En el protocolo que llevamos a cabo, incluimos voluntarios mayores de 65 años justo cuando la conversación era que estaba aprobada solo hasta los 60 años porque no habían datos científicos”, cuenta Sánchez.
"Ya se está trabajando en mejorar la vacuna actual para reforzar su eficiencia y responder a las nuevas variantes" - Rector Ignacio Sánchez.
–Incluimos voluntarios de edades más avanzadas y fuimos entregando los resultados al Minsal en noviembre, diciembre y enero. Fue el protocolo más masivo en el mundo en términos numéricos en esa población. Eso permitió empezar en febrero la vacunación en ese grupo de personas, que eran los que se estaban muriendo. Sinovac china agradeció mucho ese aporte científico.
Planta en Chile
El vínculo de los ejecutivos de Sinovac con la UC se viene gestando hace un rato. Ya en octubre ellos estuvieron en Chile, visitaron la universidad y se reunieron con los ministros de Ciencia y de Salud. “Hace un par de años que tenemos comunicación y contacto a través de nuestros investigadores”, señala.
Alexis Kalergis y su equipo fue el puente con el laboratorio, ya que éste participó en 2019 de un congreso de vacunas donde se inició el contacto y luego vino un trabajo conjunto pensando en una vacuna para el virus sincicial.
“Desde Sinovac me comentaron que estaban perfeccionando su vacuna para las variantes”- Rector Ignacio Sánchez.
Hoy, con la idea de una futura planta productora de vacunas en Chile, se piensa en realizar esos proyectos en conjunto. “El vicepresidente de Sinovac me comentó que quieren partir con una planta que fabrique, de aquí a un año, un número cercano a 60 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus para todo Latinoamérica. Miran con mucho interés a Chile y a Brasil, donde irán la próxima semana. En un mes más vendrán a nuestro país.
–¿Ya es un hecho que se instalarán aquí?
–Es un hecho que ellos ya tienen la decisión de hacerlo. La UC va a ser socia de Sinovac en todos los ámbitos científicos de patentes, innovación y ciencia. Pero en los ámbitos comerciales de su planta, lo que queremos es abrirles puertas en el mundo público y privado, en Santiago y en regiones. Ellos dicen que si están dadas esas condiciones, se instalan en Chile.
–¿Qué gana la UC en esta alianza con Sinovac?
–La principal ganancia es nuestro aporte al país. El aporte que hemos hecho en el tema de vacunas no nos ha significado ningún ingreso económico. Ahora, si producto del desarrollo científico futuro en esta alianza, aparecen vacunas generadas en la universidad, que se comercializan, por supuesto que ahí los royalties y los aportes a los científicos y a la institución siempre están como derecho de propiedad intelectual. Pero la campaña de vacunación masiva no ha tenido ninguna retribución económica. Y no se justificaría tampoco.
–¿Cuáles son los plazos que se están manejando para instalar la planta?
–Sinovac quiere concretar el proyecto este segundo semestre, y en un año quiere ya estar produciendo vacunas. Si es así, a finales de 2022 debería iniciarse la producción. Pero hay que ser cauteloso, porque esto depende varias cadenas de autorizaciones.
Tema estratégico
La panificación de Sinovac es muy clara. En principio quieren que todo el personal de la planta provenga de China (unas 220 personas). Luego del inicio del trabajo de la planta, hacer capacitación de técnicos y profesionales chilenos, que quede un 20% a 30% de científicos chinos y el resto, chilenos. El impacto tecnológico y de desarrollo que puede significar algo así es de mucha importancia.
–¿Está participando el gobierno, como representantes del Estado, en esto también?
–Sí, aquí han participado los ministerios de Ciencia, Salud, Relaciones Exteriores, el Instituto de Salud Pública, de los gobiernos regionales, algunos parlamentarios, universidades asociadas (U. Antofagasta y U. de Chile) y algunos privados. Si ellos vienen en visita a Chile en julio, la definición deberían tomarla en septiembre. Han mostrado mucho interés.
–Esta alianza con Sinovac ¿cierra las puertas para que otros laboratorios lleguen a acuerdos con Chile para otras vacunas contra el coronavirus?
–No, para nada. Sé que la Universidad de Chile y la Universidad de Antofagasta han tenido contacto con otras compañías e interesados extranjeros para iniciar desarrollo de vacunas en nuestro país. Los proyectos no son excluyentes, todo lo contrario. Así como hemos tenido una buena mirada de apostar por distintas preparaciones de vacunas, si alguna de ella se hubiera retrasado nos habría permitido reemplazarla por otras. En Chile debiéramos tener ojala tres grupos de interesados en poder instalarse acá para producir vacunas, es un tema estratégico y de soberanía a futuro.