Agricultura amigable con la naturaleza: ¿Cómo aportan los ecosistemas regenerativos?

Mil quinientas gallinas se pasean libremente por las 4 hectáreas que corresponden al “Sitio de aprendizaje y modelo de producción en ganadería regenerativa para la Zona Central” en la Estación Experimental Agrícola Pirque UC, todo como parte de una estrategia que ha permitido un aprendizaje en base a técnicas en las que prevalece el respeto por el espacio de la naturaleza en los procesos de cultivos, por parte de expertos de la Facultad de Agronomía e Ingeniería Forestal, liderados por el académico Rafael Larraín.

Se trata de un laboratorio en terreno abierto que marca una diferencia en lo que es la vinculación con el medio tradicional y lo que hace la agricultura más convencional con el uso de maquinarias e insumos con los que se trata de simplificar los procesos. “Nosotros trabajamos de otra forma, tratamos de adaptar nuestro sistema a las condiciones del lugar y en vez de eliminar todo, nos apoyamos en la naturaleza para que ésta nos ayude”, explica el profesor.

“Por ejemplo, en estas 4 hectáreas, en vez de sembrar una sola cosa, mezclamos seis especies diferentes, porque desde el momento en que tienes varias plantas hay distintos bichos y posibilidades de tener más insectos, de que las plantas entre ellas se colaboren, que una le pase nitrógeno a la otra, o que las raíces de una permiten que la otra crezca mejor”, explica Larraín.

El modelo permite que sea la biodiversidad de este terreno la que vaya marcando los resultados y aprendizajes. "Miramos mucho el suelo, la salud del mismo, de tener suelos protegidos de la lluvia, del sol, de aportarle materia orgánica utilizando fertilizantes biológicos, que se convierten en alimento para todo este ecosistema que vive en él. Eso va ayudando a las plantas, al generar esas condiciones para que el sistema funcione con la menos intervención posible”, agrega el experto.
 

Animales protagonistas

Este sitio de aprendizaje partió en 2018 cuando la Fundación AgroUC accedió a destinar una pequeña superficie del campus en Pirque para estos manejos diferentes y en 2019, con el apoyo de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), se inició este proyecto, que se centra en la manera de trabajar la tierra, la aplicación de metodologías que han funcionado en otras partes y ver cómo éstas funcionan en un contexto de Chile central.

Larraín destaca la importancia de los animales para la estrategia que aplican, en especial de las gallinas como un medio para obtener fertilizante de forma natural, al igual que las vaquillas que pastean en este terreno. Como parte de esta estrategia las gallinas son movidas junto a sus gallineros, algunos con unas ruedas y otros con unos esquís gigantes, semanalmente por las 4 hectáreas que corresponden al potrero.

“Lo que es novedoso y la innovación es cómo planificamos que las gallinas vayan detrás de las vacas, para que sean éstas las que desarmen sus desechos y que estos sirvan como fertilizante. Además, que cuando empiezan a salir las moscas, sean las gallinas las que coman sus larvas. De esta forma, también están ayudando al control de los parásitos de la vaca y al pasto, que será su alimento”, explica el académico.

A esto se suma que estas 1500 gallinas ponen alrededor de 1200 huevos diarios, los que son comercializados por Ecoterra, empresa socia de este proyecto, y con la que están próximos a obtener un certificado a nivel mundial, otorgado por el Instituto Savory, que asegurará que estos huevos están manejados bajo ecosistemas regenerativos, lo que permitiría su comercialización en supermercados. "Hasta ahora en Chile hay varias personas trabajando con sistemas regenerativos y con gallinas, pero no hay nadie que esté vendiendo el producto certificado", dice Larraín, doctor en Ciencias Animales.

Los aprendizajes

Rafael Larraín comenta que el Covid-19 les generó muchas dificultades, pero que desde el segundo semestre de 2022 han mantenido la interacción con varios visitantes que muestran interés por las técnicas que están aplicando. “Eso nos encanta porque era el objetivo central: traer personas, conversar, mostrar las cosas que hemos hecho bien y lo que no, para compartir y tratar de que esto se use en otras partes”, comentó.

"Como estamos al lado de la Casona, donde hay hartas actividades con la comunidad de Pirque, invitamos a los asistentes a ver a los animales, mientras les explicamos lo que estamos haciendo. En primavera recibimos a casi 100 agricultores de Agricultura Familiar Campesina de INDAP (Instituto de Desarrollo Agropecuario) y han venido tres grupos de productores de la zona centro norte, a quienes les compartimos ideas para que así conozcan distintas formas de trabajar”, cuenta el profesor.

Entre estas dinámicas de visitas, también han recibido cursos de la UC, tanto de Agronomía UC y del Instituto para el Desarrollo Sustentable, como de otras universidades e instituciones de educación superior como el DUOC, la Universidad Andrés Bello, la Universidad de Chile, entre otras.

Los interesados en visitar este espacio pueden consultar las fechas disponibles a través del Instagram @Proyecto.R.UC o al mail del profesor Rafael Larraín: larrain@uc.cl.