Autoridades UC visitan comunidades y voluntarios en trabajos de invierno 2019
Durante un día recorrieron tres localidades de la Región de la Araucanía para acompañar a los estudiantes que viajaron a realizar diferentes intervenciones de acción social a lo largo y ancho del país.
Ya es una tradición. En cada periodo de vacaciones de invierno, autoridades de la UC visitan durante un día a los voluntarios para conocer el trabajo comunitario que los jóvenes se encuentran realizando. Esta vez, encabezados por el rector Ignacio Sánchez, la directora de Asuntos Estudiantiles, Carolina Méndez; el capellán general, padre Guillermo Green; y el director de Pastoral UC, Francisco Elorrieta, viajaron -este miércoles 17 de julio- a la Región de la Araucanía para compartir la experiencia que los jóvenes viven durante estas semanas.
Para los Trabajos de Invierno 2019, más de dos mil jóvenes participantes de iniciativas estudiantiles se trasladaron a distintas localidades para fortalecer su espíritu de servicio y compromiso con el país en temas de educación, promoción y atención de salud, asesoría legal, construcción de viviendas, y apoyo a iniciativas municipales, entre otras acciones.
Al llegar a Temuco, las autoridades fueron recibidas por cerca de 30 jóvenes de Trabajo País y Misión de Vida, ambas iniciativas de Pastoral UC, donde el ánimo, las sonrisas y la alegría marcaron la bienvenida. El grupo de visitantes pudo observar en terreno cómo los estudiantes trabajaban en la construcción de una capilla, como también un espacio para que la comunidad se pueda congregar y compartir.
Para el director de Pastoral UC, Francisco Elorrieta, esta instancia permite mirar el futuro con optimismo. “Ver a jóvenes universitarios comprometidos con la Iglesia y el país anima a seguir adelante en estos tiempos de crisis y conflicto. Es impresionante ver como casi tres mil estudiantes regalan una semana de sus vacaciones por construir un Chile más unido, más justo y más fraterno”, comentó.
Tras la primera parada, las autoridades se trasladaron a la localidad de Teodoro Schmidt para compartir con la comunidad del lugar y con los estudiantes de Trabajos de Invierno del Centro de Alumnos de Ingeniería (CAi) quienes, organizados en cuatro cuadrillas de 13 voluntarios cada una, trabajaban apoyando a familias con la construcción de invernaderos que les permitirá cultivar verduras, hortalizas y flores, entregándoles herramientas para que puedan mejorar su calidad de vida.
Carolina Méndez, directora de Asuntos Estudiantiles, valoró el aprendizaje de vida que los jóvenes obtendrán de esta experiencia. “Qué orgullo compartir con tantos jóvenes motivados y comprometidos, alegres y orgullosos por el aporte que están haciendo al país. Sin duda que estas experiencias son las que los marcarán para la vida y les entregarán herramientas personales y profesionales que son fundamentales para generar cambios y construir una mejor sociedad. Compartir con cada uno de ellos fue un regalo”, señaló.
Cuando ya se había ido el sol y después de dos horas de viaje, las autoridades llegaron al Internado de la Municipalidad de Lumaco, último lugar del recorrido, donde los esperaban cerca de 100 estudiantes de las Facultad de Agronomía e Ingeniería Forestal pertenecientes al voluntariado Trabajos FAIF, quienes buscan ayudar a la comunidad mediante la reparación de un invernadero y la construcción de un corral para cerdos.
En el lugar, pudieron compartir con el decano de la Facultad, Rodrigo Figueroa, y el alcalde de la localidad, Manuel Painiqueo, quien les agradeció por el aporte que los estudiantes realizan en la comuna cada vez que los visitan.
Finalmente, el rector Ignacio Sánchez, quien también fue voluntario hace cerca de 40 años, comentó que estas iniciativas son un gran impacto para el desarrollo integral de los estudiantes, más aún tomando en cuenta que estas acciones surgen desde sus convicciones, creatividad y deseos de aportar al desarrollo del país.
Señaló que poder participar y visitar las actividades pastorales y sociales de los estudiantes es una gran oportunidad para ver en terreno el contacto cercano que logran tener con la comunidad. “La experiencia y aprendizaje que se logra es muy marcador para el desarrollo futuro de sus vidas. Ha sido una gran alegría poder ver a los estudiantes en terreno, compartiendo su fe y realizando actividades sociales en beneficio de la comunidad y de los más vulnerables de las periferias de nuestro país”, concluyó la autoridad académica.
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