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Columna del rector: Clima laboral en la universidad


Según el rector Sánchez, un ambiente grato de trabajo produce una mejor disposición y un mejor rendimiento en el desarrollo de nuestras tareas, fortaleciendo el sentido de equipo y de comunidad. “Se debe fomentar la responsabilidad de las personas en su propio desarrollo laboral, para que se sientan acogidas y valoradas”, dice la autoridad.

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photo_camera Karina Fuenzalida.

El clima laboral es de gran importancia en una institución. Una persona trabaja mejor si se siente bien consigo misma y con su entorno, y si además puede entender a cabalidad el ambiente en el que se desenvuelve. En el caso de las universidades -apunta el rector Ignacio Sánchez  en una columna que recoge este 1 de agosto diario La Segunda- , es de gran importancia medir el clima organizacional y hacer un seguimiento de su evolución de manera cercana. Entre las consecuencias positivas de un buen clima laboral podemos nombrar la alegría, afiliación, productividad, baja rotación, satisfacción, pertenencia, adaptación, innovación y otras. Por otro lado, sostiene que un mal clima laboral se relaciona con alta rotación laboral, ausentismo, escasa innovación, baja productividad y desmotivación. Así, “un ambiente grato de trabajo produce una mejor disposición y un mejor rendimiento en el desarrollo de nuestras tareas, fortaleciendo el sentido de equipo y de comunidad”, manifiesta. 

En la UC, cada dos años se realiza un estudio de clima laboral para disponer de un diagnóstico organizacional acerca de nuestra experiencia en el lugar de trabajo. Ello permite detectar cuáles son los aspectos que están bien gestionados y en cuáles una unidad debe modificar y trabajar para avanzar en su proceso de mejoras. Los positivos resultados obtenidos en el pasado, y que se han confirmado en la encuesta que hemos conocido este mes, “nos motivan a seguir trabajando para superarnos en especial en las unidades que tienen aún un importante margen de progreso”, señala la autoridad.  Y agrega que la evaluación positiva en las últimas versiones constituye un insumo de trabajo fundamental para la universidad; es expresión de un muy buen clima de trabajo cotidiano, producto del esfuerzo de las personas que conforman los equipos y unidades, y signo inequívoco de compromiso, respeto e identificación institucional en la labor tanto de colaboradores como de jefaturas.  

“La construcción de un buen clima laboral  -objetivo de nuestro plan de desarrollo para este quinquenio-  reconoce en las personas que conforman la comunidad UC uno de los pilares fundamentales de nuestra misión institucional”, enfatiza el rector Sánchez.   Luego dice que se debe fomentar la responsabilidad de las personas en su propio desarrollo laboral, para que se sientan acogidas y valoradas.  “Así tendremos una actitud de respeto y trabajo en equipo, siendo agentes proactivos de una cultura de sustentabilidad y de vida saludable”, afirma.
 

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