Columna del Rector: Liderazgo estudiantil

Recientemente en la UC tuvimos la oportunidad de reunirnos con un grupo de cerca de 30 líderes estudiantiles, destacados en diversas áreas de la vida universitaria. Cada año la comunidad participa de una convocatoria para proponer a aquellos estudiantes que han liderado diversas iniciativas y tras un proceso de selección, se define a los estudiantes que estarán en la lista de los jóvenes líderes UC de cada año. A esta reunión se refiere el rector Ignacio Sánchez en una columna que publica el viernes 13 de septiembre el diario La Tercera.

La autoridad señala que esta actividad reconoce las labores de liderazgo que realizan en diversos ámbitos, tales como inquietudes sociales, de dirigencia estudiantil, pastorales, de sustentabilidad, vida saludable, innovación, inclusión, interculturales, de arte, cuidado de la naturaleza, educativas, de salud y de otras áreas a través de sus proyectos y actividades. “Estas son instancias de gran aprendizaje y formación en valores, lo que les va a acompañar en su desarrollo profesional futuro”, comenta.

Al conocer las historias y proyectos de estos alumnos y alumnas, nos damos cuenta que incluyen trabajos en el campo social a través de construcción y habilitación de áreas comunitarias; educacionales con trabajo con niños vulnerables y comunidades de base; dirigencia estudiantil nacional y al interior de la universidad, por medio de la FEUC, Consejería Superior, representación de centros de alumnos, consejerías territoriales y académicas; pastorales a través de misiones, trabajos con estudiantes secundarios, aporte a comunidades y construcción de capillas; estímulo y desarrollo del rol de la mujer en labores de liderazgo, entre otros.

Por otra parte, se plantean cambios curriculares que impactan en la enseñanza universitaria; de salud rural en aspectos de prevención y educación; apoyo tecnológico y online; sana convivencia y salud mental; actividades deportivas con talleres a los jóvenes y niños; iniciativas científicas a través de academias y congresos; apoyo agrícola en la siembra y cultivos; asesoría en aspectos legales con consejería a grupos vulnerables; actividades artísticas en contacto con las comunidades; y muchos ejemplos más. “Todos estos trabajos sin duda han dejado una huella imborrable en las comunidades beneficiadas y de manera muy especial en nuestros estudiantes”, sostiene Sánchez.

Uno de los aspectos más notables de estas iniciativas, según el rector, es la mirada, planificación y trabajo interdisciplinario, es decir el aporte de los estudiantes desde diferentes ámbitos y perspectivas, lo que sin duda enriquece el aporte y le da una mirada más amplia al proyecto realizado. Esta característica permite que estudiantes de diversas carreras se conozcan, aprendan a trabajar en equipo y puedan así conocer y valorar la entrega de diferentes disciplinas. Así, “vemos como cada año los estudiantes dan testimonio de su compromiso para mejorar las condiciones de vida de nuestros habitantes, en particular de los más vulnerables”, dice. Además, muchos quieren compartir su fe y aprender de la comunidad, que con gran generosidad, tiene mucho que enseñarles. “Son esfuerzos estudiantiles que surgen desde sus convicciones y deseos de aportar al desarrollo del país”, advierte.

Agrega que estos proyectos son de vital importancia en el desarrollo de los estudiantes. Para que se puedan realizar, dice, se requiere tener sueños, pasión, organización, trabajo en equipo, perseverancia y evaluación de resultados para corregir los errores que se presenten. Por otra parte, significan una ventana a la realidad nacional y a poder adentrarse lo que viven y requieren los habitantes de nuestro país. “Es una mirada y una respuesta a la realidad, con todas las desigualdades que conocemos y que debemos trabajar por disminuir. Significa también una ventana hacia el interior de los mismos jóvenes, para que puedan conocerse más y lograr un punto de encuentro que signifique un crecimiento personal”, manifiesta.

A su juicio, estas actividades son muy necesarias para lograr una formación integral. La etapa universitaria debe incluir aspectos diversos, que serán vitales para que los estudiantes puedan aportar al bien común y a lograr un país más integrado y sustentable, en que los jóvenes sean agentes de cambio. “Es rol de las universidades crear el entorno apropiado para que la creatividad, compromiso y generosidad de los estudiantes florezcan y den frutos”, enfatiza el rector.