¿Cómo contar una tesis de doctorado en tres minutos, en inglés y a un público no especializado?
Diez estudiantes de doctorado de la Universidad Católica, provenientes de diversas áreas del conocimiento, se subieron al escenario frente a cámaras, luces y una audiencia en la que se encontraban el rector, autoridades universitarias y sus propios compañeros, para competir en el concurso “Tesis en 3 minutos”, que desde 2013 desarrolla la Escuela de Graduados. El ganador, Benjamín Diethelm del doctorado en Ciencias Biológicas, representará a la institución con su trabajo sobre una enfermedad que afecta a la industria del salmón, en la final internacional organizada por la red U21.
Es jueves 8 de agosto, a las 10:30 de la mañana. Un grupo de seis estudiantes de doctorado llega al auditorio del Centro de Innovación Anacleto Angelini UC, en el Campus San Joaquín. Lucen algo serios, pero por sobre todo, muy concentrados. Prueban sus micrófonos lanzando algunas frases en inglés y dan pasos sobre el escenario iluminado. En el lugar hay varios focos, cámaras y un gran cronómetro a sus espaldas, que marca el plazo fatal: tres minutos.
Durante semanas se han preparado para la final de “Tesis en Tres Minutos” (3MT®), competencia creada en 2008 por la Universidad de Queensland, Australia, y que desde 2013 organiza en Chile la Escuela de Graduados, de la Vicerrectoría de Investigación. El desafío no es menor: explicar en tres minutos, en inglés y para un público no especializado, sus investigaciones, aquellas en las que han trabajado los últimos tres o cuatro años de su carrera. Los temas son variados y complejos: la metástasis en el cáncer, la multiculturalidad o la contaminación del aire, entre otros.
Investigaciones difíciles explicadas en fácil, y con impacto
“Reitero el reconocimiento por aceptar este desafío de comunicar de manera breve pero convincente, un trabajo que en algunos casos ha tomado tres o cuatro años. No es fácil, pero tienen las habilidades y el conocimiento para lograrlo”, dijo el rector Ignacio Sánchez al inicio del evento. Su mensaje fue especialmente significativo para los diez finalistas que se encontraban sentados en segunda y tercera fila, justo detrás de las autoridades.
Como recordó en su discurso, más de 290 estudiantes de doctorado de la universidad han participado en este concurso en total. Cada año, quien resulta ganador o ganadora, representa a la UC en la gran final organizada por la red internacional Universitas 21, de las cual la universidad forma parte junto a 28 instituciones de Educación Superior de distintas regiones del mundo.
En esta versión, el equipo de la Escuela de Graduados recibió 19 postulaciones correspondientes a 15 programas de doctorado. Y llegaron a la final 10 candidatos y candidatas, quienes llevaron al escenario investigaciones en diversas áreas.
Un jurado encabezado por el rector de la universidad tuvo la difícil misión de escoger los nombres ganadores. Junto a él estuvo Diego Cosmelli, director de la Escuela de Graduados; Ricardo Rosas, director del Centro de Desarrollo de Tecnologías de Inclusión, CEDETi UC; Julie McPherson, emprendedora de Endeavor y miembro de diversos directorios; y Paula Núñez, estudiante del doctorado en Ciencias de la Agricultura, ganadora de 3MT® 2022. Ella representó a la UC en la versión internacional del certamen de U21 y su presentación ganó el “People‘s Choice Award 2022” (premio del público) con más de 900 votos, siendo la primera sudamericana en obtener ese logro.
¿Cuáles fueron los criterios del jurado? Estilo de comunicación, es decir, si el tema de la tesis y su significado fue comunicado en un lenguaje apropiado para un público preparado, pero no especialista; compresión, esto es, si la presentación ayudó a los asistentes a entender la investigación; y compromiso, en otras palabras, si el discurso hizo que el público se interesara en saber más sobre el tema.
En base a ello, los estudiantes premiados fueron:
• Primer lugar: Benjamín Diethelm, estudiante del doctorado de Ciencias Biológicas mención Genética Molecular y Microbiología, con su presentación sobre una enfermedad que afecta a los salmones en Chile: “Understanding the Epidemiology of Piscirickettsia salmonis in Farmed Salmon”.
• Segundo lugar: Camila Román, estudiante del doctorado en Psicología, con su exposición sobre el dolor crónico: “I like it, but it frightens me: Undertanding the exercise intentions of people with chronic pain”.
• Mención Honrosa: Cristian Espinoza, estudiante del doctorado en Ciencias Biológicas, mención Ciencias Fisiológicas, con su investigación sobre la metástasis en el cáncer, “Fixing the subways doors to improve cancer survival” .
• Premio del Público: Phillip Ormeño, estudiante del doctorado en Biotecnología Vegetal, con su tesis sobre un tipo de uva resistente a los hongos: “A new Fungus Resistant Grapevine: more wine, fewer pesticides”.
Como explica Diego Cosmelli: “Con 3MT® buscamos fortalecer las habilidades de comunicación en investigación y de presentación académica de nuestros estudiantes de doctorado. También, apoyar el desarrollo de la capacidad para explicar efectivamente su investigación, en un lenguaje apropiado y a un público no especializado. Y, finalmente, difundir innovaciones que impactarán positivamente en el desarrollo de la investigación en distintas áreas del conocimiento”.
Más allá del hecho de haber ganado o no, “sé que todos nos quedamos con el valor de esta tremenda experiencia”, afirmó el vicerrector de Investigación Pedro Bouchon, al finalizar la competencia. Tal como lo expresó la autoridad, tras cada participación hubo que vencer no pocos obstáculos: la timidez, la barrera idiomática, la constricción del tiempo y quizás, la poca costumbre de hablarle a un público que no comparte el lenguaje técnico.
Y como agregó la autoridad: “Hoy acá están, habiendo superado con distinción todos estos desafíos. Para nosotros también es un enriquecimiento personal y profesional saber sobre las investigaciones que están realizando en sus doctorados. Como vicerrector de Investigación, no deja de sorprenderme la riqueza, profundidad e impacto de las temáticas presentadas”.
Entre los participantes también estuvieron: José Joaquín Carvajal (Matemática), con su trabajo llamado “Divide and you will find your treasure”; Francisco Quilodrán (Educación), con la presentación “Embracing Multiculturalism in the Classroom”; Cyndi Tabilo (Ingeniería Biológica y Médica), con “A family tree can save us from the possible next pandemic”; Nibaldo Avilés (Ciencias de la Ingeniería, área Ingeniería Civil), quien presentó “Virtual lungs: the future of mechanical ventilation”; Lynda Pávez (Química), con “Keeping water clean: Addressing Pharmaceutical Pollution”; y Rocío Barrón (Ingeniería Biológica y Médica), quien pasó adelante con “Innovative biocontrol: bacteriophages into edible coating to eliminate Salmonella spp. in chicken meat”.
Los diez finalistas fueron preseleccionados por un comité conformado por Álvaro Ossa, director de Transferencia y Desarrollo; Margarita Aliaga, directora de investigación y postgrado de la Facultad de Química y de Farmacia; Eliette Ángel, coordinadora de la Unidad de Comunicación del Conocimiento de la Vicerrectoría de Investigación; y Florencia Roncone, coordinadora de Internacionalización de la Escuela de Graduados. Asimismo, todos los participantes tuvieron la posibilidad de participar en un taller de comunicaciones impartido por la periodista y editora del sitio web institucional UC, Nicole Saffie, de la Dirección Digital, y un workshop de inglés, a cargo de English UC, para preparar sus presentaciones.
Benjamín y los salmones
“El foco de mi investigación es entender mejor la epidemiología de una enfermedad bacteriana que afecta a los salmones de cultivo, que se llama Piscirickettsiosis. Esta los ataca en la fase de agua de mar -la última etapa de su crecimiento-, y es súper devastadora, produce muerte por miles, de los animales de cultivo. Y hay muchos factores de esta enfermedad que todavía no se entienden bien. En particular, no tenemos claridad sobre qué medidas tomar para minimizar la severidad de los brotes de esta enfermedad. Por lo tanto, la tesis apunta a eso: juntar grandes cantidades de datos y hacer un tratamiento estadístico bien riguroso, con el fin de poder entender este factor. Con eso podrías tener un mejor control de la enfermedad”, explica el ganador de la competencia, Benjamín Diethelm.
A unos metros se encuentra su profesor guía, el académico Fernando Mardones, de la Escuela de Medicina Veterinaria. También, sus colegas de laboratorio, quienes llegaron en grupo a hacerle barra en la final del 3MT®. Su co-tutor doctoral, el profesor Francisco Melo, de la Facultad de Ciencias Biológicas, no pudo asistir, pero ha sido clave para Benjamín. “Hay un componente de la genética del patógeno que es muy interesante de explorar. Y el profesor Melo tiene amplia experticia en bioinformática”, detalla.
- ¿Por qué quisiste participar en la competencia?
-Porque es un desafío que, encuentro, le hace muy bien a uno.
- ¿Te refieres a salir de la zona de confort, al tener que hablarle a un público no especializado?
-Uno sale de la zona de confort y además, le hace bien a mi propia investigación, porque si hago este esfuerzo de resumir mi tesis en tres minutos, eso me ayuda a entenderla mejor. Cuando estás cursando un doctorado muchas veces tienes la visión “de árbol”, es decir, ‘estoy en esta parte del problema específico, tengo que hacer mi experimento y mi modelo para este problema’. Cuando haces estos ejercicios de comunicación científica, vuelves a ver la visión de bosque general, que es muy sano para uno. Otra cosa que me motivó es que 3MT® le da visibilidad a nuestro equipo de investigación, lo que es súper valioso.
- ¿Imaginaste que ibas a quedarte con el primer premio el concurso?
-Pensé que mi candidatura podía ser competitiva, así que llegué con cierta esperanza. Cuando estábamos en el evento, al ver las presentaciones de mis compañeros, pensé que no iba a ganar, porque algunas eran realmente extraordinarias.
- ¿Por qué es importante la comunicación de la ciencia para las personas?
-Porque lo que nosotros hacemos muchas veces es de una especificidad tal, que es difícil de entender por el público general. Por tanto, el esfuerzo de comunicación científica es fundamental para que la población en general se haga partícipe y entienda lo que se está haciendo en las universidades, y también ver de qué modo la investigación, aunque sea de forma indirecta, puede impactar en la calidad de vida de las personas.
- ¿Para aterrizarlo y vincularlo también con la sociedad?
-Justamente. Porque al final la misión de la ciencia es mejorar la sociedad, y para eso tiene que haber este esfuerzo de transferencia, la que muchas veces es tecnológica, en el sentido de que mi disciplina científica la convierto en una tecnología utilizable. Pero también tiene que haber transferencia en el sentido de comunicación, de aterrizar esa investigación al público común.
- En tu caso, participaste en 3MT con una investigación sobre una enfermedad que golpea a la industria del salmón. Es un ‘temazo’, súper contingente.
-Es que Chile, económicamente, recibe muchos ingresos de la salmonicultura. Es una industria que le da pega a miles de personas.
-Y que también está cuestionada. ¿Cuál podría ser tu aporte en ese sentido?
-Sí, está muy cuestionada. Y la epidemiología podría ayudar a que sea más sustentable, al mejorar el bienestar animal, y evitar las pérdidas monetarias que ellos tienen por enfermedad infecciosa. Para mí esto fue salir de la zona de confort porque jamás me habría imaginado haciendo una tesis doctoral en salmones. No porque no me guste o porque piense que es algo malo, sino que no estaba en mi radar, simplemente. Pero acepté el desafío y me siento muy contento de haberlo hecho porque es un tema bien apasionante, en el cual hay mucho capital humano e inversión de recursos. Por lo tanto, uno puede hacer buena investigación ahí.
Benjamín estudió Química y Farmacia en la UC y prosiguió con un magíster en Ciencias Farmacéuticas que terminó en la Universidad de Maryland en Estados Unidos, dando un giro en sus intereses desde la química medicinal a la epidemiología. Confiesa ser muy curioso y provenir de una familia muy musical, “toco flauta dulce barroca desde hace años”, cuenta. Su futuro profesional lo imagina tanto en la academia como trabajando en la industria, o incluso en el campo de la música.
Con respecto a la competencia, considera que si bien puede ser difícil para algunas personas, es una experiencia que recomienda. “Es un muy buen ejercicio de comunicación científica, porque al final todos los que estamos en ciencia tenemos que comunicarla de algún modo y esta es la instancia clave para hacerlo”, dice.
A pocos días de ganar el concurso, cuenta que se siente “contento” y también “orgulloso” de ser el representante de la universidad y de Chile en la final internacional de U21, que se realizará en noviembre próximo y que se podrá seguir de manera online.
Revisa las presentaciones de los finalistas 3MT® UC 2024, en un evento que fue presentado por la periodista científica Andrea Obaid.
*Conoce las historias e investigaciones de quienes protagonizaron la final del concurso en 2023.