Desafíos de la igualdad de género
Las crecientes demandas en esta materia han visibilizado la importancia de que las instituciones, -y en particular las universidades-, consideren la equidad de género como una arista central para avanzar en el desarrollo del país, más aún, considerando el contexto de crisis social y sanitaria que hemos vivido. “Se hace necesario fomentar dinámicas y prácticas de corresponsabilidad, que aboguen por mayor equidad en la distribución de tareas al interior del hogar y en los espacios laborales”, sostiene el rector Sánchez en una carta en La Tercera.
photo_camera Es necesario fomentar dinámicas y prácticas de corresponsabilidad, que aboguen por mayor equidad en la distribución de tareas al interior del hogar y en los espacios laborales.- Foto Pexels.
“Se ha realizado un Congreso Internacional con la participación de importantes universidades de la región, con el desafío de avanzar hacia comunidades universitarias que resguarden el principio de equidad como un eje articulador de la convivencia al interior de las casas de estudio. Es una preocupación constante fortalecer el respeto a la dignidad de las personas y el pleno desarrollo de todos los miembros de su comunidad. En la UC en mayo del año 2019, creamos la Dirección de Equidad de Género, con la finalidad de promover la igualdad de oportunidades para hombres y mujeres en el proyecto educativo, propiciando el desarrollo de la conciliación y la corresponsabilidad entre la dimensión personal, familiar y laboral.
Las crecientes demandas en materia de equidad de género han visibilizado la importancia de que las instituciones, -y en particular las universidades-, consideren la equidad de género como una arista central para avanzar en el desarrollo del país, más aún, considerando el contexto de crisis social y sanitaria que hemos vivido. La pandemia ha exigido el aislamiento físico y social, lo cual ha implicado que la crisis de los cuidados se visibilice con mayor fuerza. Esta realidad ha tenido impacto en varias dimensiones, dificultando la delimitación del espacio laboral, personal y familiar, produciendo un deterioro en la calidad de vida y en la salud mental de las comunidades. .
"La pandemia ha exigido el aislamiento físico y social, lo cual ha implicado que la crisis de los cuidados se visibilice con mayor fuerza. Esta realidad ha tenido impacto en varias dimensiones, dificultando la delimitación del espacio laboral, personal y familiar, produciendo un deterioro en la calidad de vida y en la salud mental de las comunidades"- rector Ignacio Sánchez.
Se hace necesario fomentar dinámicas y prácticas de corresponsabilidad, que aboguen por mayor equidad en la distribución de tareas al interior del hogar y en los espacios laborales. Son pasos sustantivos para avanzar hacia un mayor bienestar, que permita asumir una vida familiar y laboral más sustentable. Las universidades se enriquecen con la diversidad de su comunidad.
La diversidad como principio ético y el respeto como práctica de ese horizonte originan el desafío sobre el cual queremos avanzar como comunidad, generando diálogos sostenidos que enriquezcan nuestro espíritu ciudadano y fortalezcan la bidireccionalidad de nuestros vínculos”.
