Destacados académicos de universidades del G9 analizaron los efectos de la pandemia y el estallido social
Las repercusiones en la educación, economía, salud mental y ciudadanía del 18 de octubre y el actual escenario provocado por el coronavirus fueron abordadas por Sol Serrano, Rodrigo Valdés, Paula Ascorra y Álvaro Langer. El seminario virtual, en el que también participó el rector Ignacio Sánchez, reunió a más de 600 personas y fue el punto de partida de un ciclo de conversaciones que realizarán mensualmente las instituciones pertenecientes a la red de universidades públicas no estatales.
Evaluar las múltiples consecuencias del 18 de octubre y la crisis provocada por el COVID-19 fue el objetivo del seminario virtual “Pensando la sociedad chilena en tiempos de estallido social y pandemia”, que reunió a connotados expertos de diversas universidades pertenecientes a la Red G9. Más de 600 personas siguieron el seminario de la red de universidades públicas no estatales que coordinó la Universidad Católica, dando inicio a un ciclo de seminarios que se realizarán mensualmente.
Tal como explicó el rector de la UC Ignacio Sánchez, quien dio la bienvenida a esta sesión que fue moderada y organizada por el profesor de la Escuela de Psicología de la Universidad Católica Roberto González, tanto el estallido social como la pandemia constituyen los “episodios más serios que ha vivido nuestro país en las últimas décadas” y han generado una serie de repercusiones en el sistema educativo de Chile. “Hemos tenido que adoptar una serie de decisiones como la incorporación de la docencia a distancia y el teletrabajo, pero también es importante la reflexión que se ha generado a propósito del aporte que realizamos al país”, sostuvo.
Roberto González, destacó que esta instancia virtual permitió conectar a muchas personas de distintas ciudades del país en torno a las distintas visiones que existen en torno a un tema de tanto interés público. Indicó que “fue una real oportunidad para reducir el centralismo, y la noción de que todo se hace en Santiago, logrando convocar así a toda la comunidad académica de las nueve universidades de la red G9”. González agregó que esta iniciativa de la Red G9 también permitió democratizar el conocimiento, donde todos pueden interactuar, recibiendo preguntas de la audiencia y enriqueciendo la discusión del país. “Fue muy interesante tener un panel de dos académicas y dos académicos, con distintas trayectorias, que tuvieron la oportunidad de expresar opiniones distintas, desde una reflexión respetuosa”, afirmó el académico.
La académica UC y Premio Nacional de Historia Sol Serrano fue la primera expositora del seminario. En su intervención destacó el mayor apego a la vida que se ha evidenciado durante la actual pandemia en comparación con lo que ocurrió durante la peste negra que afectó al mundo en el siglo 14, y que cobró proporcionalmente una mayor cantidad de muertes (casi al 30% de la población de Europa). “Hoy la vida nos importa más. Esto se basa en que cambiamos nuestra idea del futuro, como algo que podemos incidir y cambiar”, argumentó la historiadora.
“Hoy la vida nos importa más. Esto se basa en que cambiamos nuestra idea del futuro, como algo que podemos incidir y cambiar”- Sol Serrano, historiadora UC
Sin embargo, añadió que los tres grandes pilares sobre los cuales se ha sostenido la idea de futuro y de progreso de occidente - la revolución científica, el capitalismo y la democracia representativa “han entrado en una crisis muy profunda”. En tal sentido, la pandemia puede constituir una oportunidad para repensar el futuro. “Es tan grande el nivel de incertidumbre que enfrentamos, que puede ser un gran terreno arado para generar un nuevo diálogo sobre la sociedad”, concluyó Sol Serrano.
Salud mental e inequidad en la educación
La fragilidad de la salud mental de los chilenos es uno de los aspectos que se han evidenciado a propósito del estallido social y la pandemia. Álvaro Langer, académico del Instituto de Estudios Psicológicos de la Facultad de Medicina de la Universidad Austral, afirmó que es necesario tomarse muy en serio el tema, pues tal como lo advirtió la Organización Mundial de la Salud, “las consecuencias que existan en el plano de salud mental a propósito de la pandemia, pueden ser mayores al mismo virus”.
En ese sentido, añadió que resulta importante el rol que han desempeñado las universidades en el contexto de la mesa social de COVID-19, pero que también resulta esencial que actores del mundo político adopten acciones, como el incremento del presupuesto asignado a salud mental, que hoy representa sólo el 2% del presupuesto total de salud.
“Las consecuencias que existan en el plano de salud mental a propósito de la pandemia, pueden ser mayores al mismo virus” - Álvaro Langer, Instituto de Estudios Psicológicos, Universidad Austral
Paula Ascorra, directora de la Escuela de Psicología de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, señaló que el estallido social y la pandemia representan una oportunidad para repensar el sistema educativo. “Tenemos que evaluar qué tipo de educación queremos y cómo abordar las brechas de inclusión y segregación”, afirmó. En ese sentido, agregó que la pandemia había dejado de manifiesto que un 40% de los estudiantes no cuenta con acceso a internet, lo cual no solo ha dificultado la educación online, sino que también volvió a recordar la precariedad y el hacinamiento en el que viven muchos alumnos. En su exposición enfatizó la idea de fortalecer la educación pública, promoviendo la participacion de los distintos actores del sistema de cara a los desafíos que ha dejado la pandemia y el estallido social.
“Tenemos que evaluar qué tipo de educación queremos y cómo abordar las brechas de inclusión y segregación” - Paula Ascorra, directora de la Escuela de Psicología de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso
Efectos económicos de la crisis
El profesor de la Escuela de Gobierno de la UC y ex ministro de Hacienda Rodrigo Valdés, enfatizó que los shocks que sufrirá la economía chilena tanto por la pandemia como el estallido social serán bastante grandes, aunque probablemente menores a los de 1982. Según señaló, el desempleo que se producirá en el país cambiará el eje del debate en el plano económico. “Pasaremos de una fase que podríamos llamar ‘aspiracional’, en la que queríamos lograr un mayor ingreso e igualdad, a una etapa en la que intentaremos proteger lo que tenemos y lo que hemos logrado construir”, afirmó.
El economista también se refirió al proceso de desconfianza que ha caracterizado a Chile en el último tiempo y la necesidad de generar con una mayor urgencia acuerdos transversales, que permitan generar una estrategia fiscal y social que permita un impulso reactivador del país. En ese sentido valoró el proceso constituyente como un camino civilizado de discusión que podría permitir la salida de la crisis que enfrenta el país. “Es muy importante cuidar los espacios de reflexión y las universidades tienen un rol central, en un escenario donde nos quedan pocas instituciones fuertes”, añadió Valdés.
“Pasaremos de una fase que podríamos llamar ‘aspiracional’, en la que queríamos lograr un mayor ingreso e igualdad, a una etapa en la que intentaremos proteger lo que tenemos y lo que hemos logrado construir” - Rodrigo Valdés, Escuela de Gobierno UC
Aprendizajes de la pandemia
Una de las preguntas que surgió del público que asistió al seminario a través de Zoom y Youtube -el próximo lo organizará la Universidad de Concepción el 17 de junio (“Desafíos en la Educación Superior post pandemia”)- fue referida a la enseñanza que dejará la pandemia.
Rodrigo Valdés explicó que una de las conclusiones es que “hay cambios que se pueden implementar sólo en conjunto, aun cuando muchas veces cuesta lograr que las personas reaccionen frente a incentivos para lograr una acción colectiva”. Si bien esto plantea un cambio cultural que puede ser lento, representa un desafío que debieran promover también los actores políticos.
Sol Serrano enfatizó que uno de los aspectos interesantes que puede plantear el actual escenario son los “cambios que van a existir con respecto a las formas de consumo y de vida social”, sobre todo al enfrentarse las personas en un contexto de mayor introspección y de distanciamiento social.
En ese sentido, Paula Ascorra destacó que tal como evidenció el estallido social, se advierte una necesidad de muchas personas de encuentro con otros, muchas veces facilitada por las nuevas tecnologías, que va más allá de la vida productivista.
Álvaro Langer advirtió que si bien se trata de una oportunidad, no debe desconocerse que la pandemia se enfrenta desde una inequidad muy profunda que caracteriza a la sociedad chilena. “Siguiendo la metáfora, no estamos en el mismo barco. Si bien compartimos en un mismo océano, hay algunos en un bote, otros en un yate y también quienes se tratan de afirmar de una madera. Reconocer esto es muy importante para poder avanzar con un cambio de sociedad”, señaló.
En tanto, el rector Ignacio Sánchez concluyó que “sería un gran aporte que la crisis sanitaria nos demostrara lo superfluo que resultan muchas expresiones materiales y el consumismo excesivo de la sociedad actual, que dejan de lado aspectos cruciales como el valor de la familia, el valor y la dignidad de la persona y la solidaridad entre otros aspectos”.
“Sería un gran aporte que la crisis sanitaria nos demostrara lo superfluo que resultan muchas expresiones materiales y el consumismo excesivo de la sociedad actual, que dejan de lado aspectos cruciales como el valor de la familia, el valor y la dignidad de la persona y la solidaridad entre otros aspectos” - Ignacio Sánchez, rector