Columna del rector: El compromiso UC con la inclusión laboral

Según el rector Ignacio Sánchez,  las universidades deben aportar a la reflexión científica, cultural y a la comprensión que la valoración de la dignidad humana en la diversidad es clave para la construcción de una sociedad moderna, más justa y sustentable.  Así,  dice, los jóvenes y adultos con necesidades especiales deben ser parte de nuestro quehacer. Para nuestra institución, este desafío está en el centro del proyecto educativo.  De esta forma, hace casi dos años nace el Centro Down UC, un espacio interdisciplinario de crecimiento y encuentro para familias con integrantes que son portadores de Síndrome de Down.  “Buscamos que la comunidad UC los acoja, acompañe, apoye, aprenda de ellos y ellas, para colaborar así con su completa integración a la sociedad”, precisa en una columna que publicó este martes 27 el diario La Segunda.  

Dice que de esta forma tenemos el convencimiento de que las personas con discapacidad cognitiva son capaces de aportar de manera significativa al desarrollo de una institución y de la sociedad, y que los beneficios que se generan son muy amplios. Este aporte incluye a la institución, a su comunidad, a las familias y a las personas con síndrome de Down.  “Se trata entonces de colaborar a dignificar a la persona con discapacidad cognitiva, para que a través del trabajo pueda entregar todas sus potencialidades”, apunta la autoridad.   También y junto con permitir que las personas se dignifiquen por medio del trabajo, se avanza en derribar los mitos que se orientan a tratar a las personas con discapacidad como niños de manera permanente, dejando de lado una sobreprotección malentendida y perjudicial.

Desde hace más de un año, la UC ha contratado a personas con síndrome de Down para diversas funciones, lo que ha significado un interesante desafío de inclusión, en el que toda la institución se ha beneficiado,  Siguiendo en esta tarea, en este mes, “hemos podido firmar un acuerdo de colaboración con el Ejército de Chile, para poder apoyarlo en la contratación e inclusión laboral de personas con discapacidad cognitiva, específicamente personas con síndrome de Down”.  Explica que en conjunto se realizará la descripción del puesto de trabajo, necesidades  y caracterización de su perfil, apoyo de la selección de un “sujeto par” dentro de la institución que apoyará a las personas contratadas, y se realizará el seguimiento e implementación de las mejoras que corresponda para su progresión en el trabajo.

Para el rector, en este proyecto conjunto, estas dos instituciones de gran importancia en nuestro país se unen en una tarea de presente y futuro: la inclusión laboral de nuestra juventud, la que es diversa y puede aportar desde sus propias identidades y características.  Y luego precisa: “El aporte de jóvenes y adultos con síndrome de Down en el campo laboral nos entrega alegría, honestidad, transparencia, trabajo bien hecho y voluntad de construir comunidad.  Un gran aporte desde la diversidad”.