Estudiantes UC participan en encuentro de red de investigación de arte de EE.UU.

La noticia de que habían resultado seleccionados les tomó por sorpresa. Entre el 2 y el 5 de marzo pasado, cuatro estudiantes de la Universidad Católica aterrizaron en Cincinnati, Estados Unidos. ¿El objetivo? Participar del Student Summit 2023, un encuentro dirigido a estudiantes, organizado por a2ru, una red de investigación en arte a la que pertenece la Universidad Católica y que es la más importante de ese país.

Cristian Fonseca, Isidora Aliaga, Esperanza Hope y Dusan Ivelic -oriundos de Arica, Rancagua, Temuco y Punta Arenas, respectivamente- vivieron una semana intensa que tuvo de todo: recorridos por museos y campus; encuentros con profesionales; y diálogos y aprendizajes con estudiantes de distintas regiones de Estados Unidos. También hubo paseos, comida estadounidense y selfies. 

Miryam Singer, directora de Artes y Cultura (DAC), de la Vicerrectoría de Investigación de la UC, recuerda cómo nació la alianza con a2ru. En esta Dirección estaban buscando, desde hacía tiempo, inspiración para abordar los problemas de la interdisciplina desde las artes. “Daniela Millar, una querida colaboradora de la DAC a quien le encantaba hurgar en internet, encontró esta organización y ‘se nos prendió la ampolleta’: tal vez allí estaba la respuesta a nuestras interrogantes. El vicerrector Pedro Bouchon enganchó ‘al tiro’ y nos fuimos a la conferencia en Boston junto a Alexei Vergara, entonces director de la Escuela de Teatro. ¡Allá descubrimos que todos tenían los mismos problemas que nosotros! Fue un alivio ver que no estábamos solos enfrentando el problema del lugar de las artes en las universidades complejas”. 

Desde 2019 que la DAC comenzó a apostar por una beca para que estudiantes de la UC tuvieran la oportunidad de participar en el Student Summit. Como explica Miryam Singer, esta dirección es la “cara visible de una voluntad más grande, que busca posibilitar el desarrollo de las artes y los artistas, para que tengan una voz cada vez más fuerte y potente en el mundo real. En ese sentido, el vicerrector Bouchon tiene claro que cada acción que se emprende hoy en el estamento estudiantil, se multiplicará mañana en el conjunto de la sociedad. La DAC lleva cinco años apostando por ese principio, y estamos felices del resultado”.

Y los estudiantes que tuvieron la posibilidad de participar en este encuentro internacional, también. Aquí sus testimonios.

"Esta dirección es la cara visible de una voluntad más grande, que busca posibilitar el desarrollo de las artes y los artistas, para que tengan una voz cada vez más fuerte y potente en el mundo real" - Miryam Singer, directora de Artes y Cultura UC. 

Dusan Ivelic (21), estudiante de tercer año de Diseño: 

“Vengo de una región alejada del centro del país, de Punta Arenas, y mi paso por el Student Summit de a2ru fue una experiencia invaluable. La oportunidad de aprender de profesionales del extranjero, y compartir con estudiantes de otras disciplinas y orígenes, ha cambiado los márgenes de lo que creía posible y me ha inspirado profundamente como diseñador. Pude interactuar con tecnología innovadora y tener conversaciones interesantes con personas que han tenido una experiencia de vida muy diferente a la mía. 

Fue mi primer viaje fuera de Latinoamérica. Desde pequeño soñaba con conocer Estados Unidos, pero nunca tuve los recursos ni las oportunidades. Desde entonces intenté aprender inglés y busqué ocasiones que me facilitaran el viaje. ¡Ahora siento que nada fue en vano! La beca que me entregó la DAC también me permitió ir a Nueva York, oportunidad de la que siempre estaré agradecido, como persona y aspirante a profesional. 

Las visitas a los laboratorios que tenía el edificio de Digital Futures -donde se realizó el encuentro -, fue lo más significativo para mí. Pude conocer el trabajo de Reneé Seward y Alejandro Lozano, diseñadores de la Universidad de Cincinnati, cuyas palabras y entusiasmo eran inspiradores. Sin embargo, lo que más valoro de mi viaje son los estudiantes con los que trabajé y compartí durante el evento; personas con las que me llevé muy bien y mantengo el contacto. 

Aprendí observando cómo funcionaba Estados Unidos en términos de usabilidad, diseño de información, urbanismo y otras áreas relacionadas con mi carrera. Muchas veces me detuve a mirar carteles, packaging, edificios y la manera en que los transeúntes interactuaban con la ciudad. Esas cosas sólo las puedes aprender en terreno, con tus propios sentidos. 

Las personas que conocí me abrieron la mente a nuevas y raras ideas, que me alejaron de mi zona de confort, lo cual agradezco. La experiencia potenció mi creatividad y me mostró problemas e ideas que para mí eran inexploradas. Además, la temática de este año fue The Future: By Design (El futuro: por el Diseño), lo que tiene mucho que ver con mis propios intereses como persona y diseñador. Los profesionales invitados nos dieron consejos de cómo innovar y solucionar problemáticas, al diseñar, en un mundo donde cualquier error puede provocar temibles consecuencias. 

También conocí en persona obras de ilustradores, artistas, tipógrafos y diseñadores gráficos que antes veía y admiraba a través de la pantalla de mi computadora. Y descubrí muchos nuevos, por lo que los referentes que tengo ahora al diseñar o crear son muy distintos.

Me siento comprometido con la universidad y con mis compañeros por haber vivido esta experiencia, y definitivamente motivaré a varias personas para que tomen la oportunidad. Siento que muchos estudiantes se intimidan o son incrédulos ante chances como esta". 

Esperanza Hope (23), estudiante de quinto año de Derecho:

“No es mi primera experiencia de este tipo, el año pasado me gané una beca Santander para ir a Londres. Pero esta de a2ru me encantó, porque estuvo muy enfocada en la transdisciplinariedad y en el integrar distintos conocimientos, algo que siento que en Chile falta mucho. Entonces describiría mi paso por el Summit como esperanzador. 

En este país, si estudias Derecho, se espera que seas abogado y se promueve poco la colaboración entre disciplinas. Conocí a muchas personas que viven la transdisciplinariedad todos los días, como ingenieros que tienen minor en dirección de cine, por ejemplo, o biólogos que estudian francés. Este congreso me abrió los ojos en ese sentido: no debes ser solo ‘un abogado’ o ‘un ingeniero’; puedes integrar cosas de distintos lados para aplicarlo al trabajo que estás haciendo en el día a día. 

En este encuentro generamos muchas redes y nos juntamos, en un mismo lugar, estudiantes de carreras tan distintas como ingeniería, derecho, biología, diseño de moda, arte y literatura, por nombrar algunas. Sobre los contenidos y actividades, me encantó que se diera espacio para la conversación, por ejemplo, hicimos rondas de diálogos para elegir el tema del proyecto que íbamos a hacer durante esos días. Para eso, al interior de la sala había distintos carteles con temas como: un futuro transdiciplinario, inclusivo o uno sustentable, entre otros. Tenías cinco minutos para elegir uno de los carteles y conversar con las personas que habían escogido ese tema. Lo encontré genial, porque son del tipo de conversaciones que no tenemos todos los días. 

Mi paso por a2ru fue como si me dijeran: ‘no te rindas. Puedes tener una carrera muy amplia’. Siempre he querido hacer algo más integrado, no lo que se espera tradicionalmente, que es pasar de la universidad a un estudio de abogados. Esta experiencia me mostró que hay otros caminos y que existen personas alrededor del mundo que queremos expandir la visión de lo que significa ser profesional. No solo para el Derecho, sino para todas las carreras.

Fue una semana donde la pasé increíble, simplemente me dediqué a aprender y a pasarlo bien. Junto con el Summit, pudimos recorrer la ciudad de Cincinnati y tuvimos un financiamiento extra para viajar a Nueva York. Estas experiencias te abren la cabeza y puedes ver que hay todo un mundo allá afuera. Un día nos ocurrió algo chistoso: junto a mi compañera Isidora (Aliaga) compramos entradas para ir a ver ballet al edificio Lincoln Center, en Nueva York. Pero habíamos corrido todo el día y no nos dio tiempo para cambiarnos. Era invierno y llegamos vestidas como si fuéramos a una excursión a Torres del Paine, pero el dress code (código de vestimenta) era súper formal, de vestido largo y tacos. ¡Todos ahí nos miraban! Nosotras nos reímos e inmortalizamos el momento con una foto.

Me encantaría incentivar al resto de mis compañeros y compañeras, para que se animen y aprendan y vivan lo que realmente quieren aprender y vivir. Que no se queden entre sus cuatro paredes”.  

Isidora Aliaga (23), estudiante de Interpretación musical en violín y Musicología: 

“Es la primera vez que represento a la universidad en el extranjero. El Summit fue enriquecedor y a la vez impresionante, porque pude manipular y experimentar con tecnología que pensaba que no existía, como realidad virtual muy avanzada. Lo más bonito es que pude conocer a las personas que la habían creado y lo habían hecho por un bien común, como una herramienta para ayudar a la sociedad. Eso fue súper inspirador.

En los grupos de trabajo que formamos me fui por el área de educación. Mi grupo estaba compuesto por personas que venían de lugares diferentes al mío, y cuando nos tocó buscar soluciones a problemáticas educacionales, me di cuenta de que sus problemas eran totalmente distintos a los míos. Ahí sentí fuerte la brecha educacional. Por eso fue inspirador conocer a estas personas que creaban soluciones tecnológicas, porque me mostraron que sí se puede hacer un cambio.
De los contenidos y actividades en las que participé, destaco que los problemas y preguntas que nos hacían plantearnos a nosotras mismas eran súper amplias; no había límites y eso es genial cuando tratas de buscar soluciones. Tuvimos la oportunidad de desenvolvernos en un contexto donde nada era imposible. Fue una súper buena estrategia para ahondar en nuestra creatividad.

Me considero una persona tecnológica y luego del paso por este encuentro, estoy mil por ciento más convencida de que la tecnología no se puede dejar de lado. Es una herramienta a la que no hay que tenerle miedo y va a ser siempre una ventaja comparativa respecto a tus compañeros, a la hora de encontrar una ‘pega’ o un proyecto. Desde que volví, trato de impulsar el uso de herramientas tecnológicas entre mis compañeros, en mi familia y si se da, con algún profesor o profesora. ¡De verdad no hay que tenerle miedo! A veces pensamos que usarla es como hacer trampa, pero viene a ayudarnos a optimizar los procesos y darnos más tiempo. 

El Student Summit abrió totalmente mi perspectiva del mundo; me ayudó a entender mi realidad desde afuera y ver cómo la percibe la otredad (…). Estuve a punto de no postular porque tenía miedo de no quedar seleccionada y esta experiencia me enseñó a creer un poco más en mí y a no dejar pasar las oportunidades por pensar que no van a suceder. Realmente no va a suceder si no lo intento”.  

Cristian Fonseca (23), estudiante de Pedagogía en educación media en Química: 

“Definiría mi paso por el Student Summit de a2ru como un desafío: era la primera vez que participaba de una experiencia de ese tipo y también que viajaba tan lejos de casa a un país desconocido, donde se habla un idioma distinto. Uno de los principales retos fue comenzar a poner en práctica el inglés. 

Durante los primeros días fue bastante difícil acostumbrarme a esta nueva cultura e idioma, pero con la práctica constante logré superarlo y tener una comunicación mucho más fluida. Esta experiencia fue muy enriquecedora, ya que pude interactuar y establecer vínculos con personas de otras culturas y aprender de ellas, como la norteamericana, asiática e india. A la vez, pude compartir con los demás estudiantes cosas de nuestro país y de la diversidad de culturas que existen a lo largo de este.

Destaco la gran cantidad de actividades que se realizaron durante el evento, como mesas de diálogo, sesiones de feedback, visitas a laboratorios y charlas magistrales, entre otras. Todas estas buscaban inspirarnos para nuestros proyectos, resaltar las disciplinas de cada participante, recalcar la importancia de la interculturalidad, la resolución de problemas, la interdisciplinariedad y el trabajo en equipo. De la mano de todas estas actividades existía una gran organización, con cronogramas y horarios por día.

Otro tema que afecta de manera positiva mi formación profesional es que el Student Summit nos permitió generar múltiples redes de contacto y de amistad a nivel internacional: con los estudiantes de distintas universidades de Estados Unidos, con los organizadores del evento, con los líderes de los distintos laboratorios y con la Universidad de Cincinnati, entre otros.  

A nivel personal, mi paso por el encuentro me permitió desarrollar nuevas habilidades comunicativas y sociales, principalmente a la hora de comunicarme en inglés con personas de diversas culturas. También participar, opinar y exponer de manera óptima y fluida en las distintas actividades que realizamos, y en la defensa de nuestro proyecto final. Si miramos el desarrollo profesional, aprendí a trabajar colaborativamente y a comprender los distintos puntos de vista dentro de un equipo de trabajo interdisciplinar.

Espero poder transmitir todo lo aprendido en la sala de clases. Mi objetivo es poder comunicar la importancia del trabajo interdisciplinario y colaborativo, y las estrategias para la resolución de problemas y la creación de proyectos. 
Me gustaría motivar a otros estudiantes a participar en las distintas instancias o convocatorias que realiza la UC. ¡Uno nunca sabe cuándo puede ganar y vivir una experiencia inolvidable como esta!”.