Historiador UC indaga sobre construcción de la figura de Fray Francisco Camacho en seminario sobre c
El académico del Instituto de Historia UC, René Millar dio a conocer su investigación sobre Fray Francisco Camacho (1629-1698) enfocado en la construcción de la imagen de santidad en base a hagiografías y textos divulgados por el padre Joseph Buendía.
“Trayectorias, vías y obstáculos en la circulación de creencias en Europa y América entre la Antigüedad y la Modernidad”, fue el título de un seminario realizado de manera conjunta por la U. de Chile, el Instituto de Historia UC y el Dipartimento de Storia de la Universidad de Roma Tre. En el encuentro diversos académicos UC dieron a conocer sus investigaciones, entre ellos, René Millar, quien presentó un análisis sobre la figura de Fray Francisco Camacho, de la orden San Juan de Dios.
En el encuentro, el decano de la Facultad de Historia, Geografía y Ciencia Política Patricio Bernedo, reflexionó sobre los inicios de la alianza surgida entre el departamento de la UC y la casa de estudios italiana. Explicó que se trata de un proyecto de “colaboración académica que ha tenido por objeto el intercambio de experiencias, conocimiento y metodologías en el ámbito de la historia religiosa, en todas sus variantes, en el contexto europeo e hispano-americano”, que en una segunda etapa incorporó a la U. de Chile.
Bernedo agradeció a los académicos del instituto que comenzaron esta iniciativa, los profesores rené Millar y Claudio Rolle, y dio a conocer que desde 2007 a la fecha ya se han realizado nueve seminarios en Roma y Santiago, junto con la publicación de dos libros. “Confiamos en que podremos aprobar un nuevo convenio para la continuidad de este proyecto y para la publicación de un tercer libro”, manifestó.
Representación de una figura venerable
El académico René Millar presentó una ponencia en este seminario, titulada “Representación y trayectoria de una vida. Fr. Francisco Camacho O.H. (Jerez de la Frontera 1629-Lima 1698) y la retórica de una conversión y significación barroca”. El historiador realizó una breve introducción sobre el origen de Fray Francisco Camacho, relató que sus padres eran campesinos y que tras un periplo que lo llevó a realizar diversas ocupaciones laborales, ingresó a la orden San juan de Dios en Perú.
Millar reveló que tras la muerte de Camacho, en el convento hospital San Diego de Lima, su fama de santidad comenzó a extenderse gracias al rol del padre Joseph Buendía, quien se dedicó a transmitir una imagen determinada del religioso, cuya vida en la práctica distó bastante de algunos atributos que se le asignaron. “La imagen que llegaba de él fue obra de los hagiógrafos”, explicó el académico y enfatizó en que estos siempre tenían en mente como ejemplo de santidad a la figura de Cristo, lo que resultaba en que la individualidad de los sujetos descritos muchas veces terminaba diluida.
Se da cuenta de cómo el padre Buendía construyó una imagen, cuyo modelo fue la vida de San Juan de Dios. Este santo vivió en el campo, se alistó como soldado, se salvó de la horca, y erró hasta llegar a Lima donde experimentó la conversión. Buendía, explicó Millar, realiza una suerte de paralelo que llega incluso a remitir a la situación en que San Juan de Dios estuvo en un hospital psiquiátrico, al igual que Camacho, quien “tiene comportamientos extravagantes producto de la conversión” y por ello, lo apedrean.
El investigador expuso el proceso de formalización para que Camacho fuera venerable, donde el autor utilizó recursos basados en la riqueza de su oratoria y retórica, lo que incluyó citas a los evangelios para compararlos con sucesos en la vida de Camacho. Los argumentos utilizados por Buendía, agregó, “eran típicos de los santos del Barroco europeo y en América se exageraron más las atribuciones milagrosas”. Con esta labor de divulgación, la imagen de Camacho comparada con el santo peruano del siglo XVII fue creciendo. “La creación (publicaciones) de Joseph Buendía está presente en el proceso apostólico que comenzó 1764 y culminó en 1784”, señaló Millar, luego el proceso se vio interrumpido con la revolución francesa y reanudado en 1833, para luego ser declarado venerable por el papa León XIII en 1881.
La pregunta planteada por el historiador en este contexto apunta a cómo fue posible que lo anterior ocurriera si en la práctica lo que se divulgó de Camacho era dudoso en gran medida. Por ejemplo, se señalaba que el fray era un intelectual, pero en realidad sólo aprendió a leer cuando entró a la orden religiosa. Al respecto, manifestó que no hay respuestas unívocas, pues aún falta analizar mayormente el proceso apostólico. Sin embargo, señaló que uno de los factores relevantes que explican el nombramiento es que se potenció la imagen milagrosa del sujeto al tiempo que se destacó sus virtudes. “En ese periodo buscaban conciliar ejercicio heroico de las virtudes con elementos milagrosos propios del Barroco y el Papa León XII era muy apegado a las ideas de virtudes, de humildad y caridad, además de asistencialidad, preocupaciones de la iglesia de la época”, expresó Millar.
En el seminario también participaron los académicos del Instituto de Historia UC Nicolás Cruz, con una presentación sobre “Conocimientos y saberes antiguos en el nuevo escenario americano”; Ximena Illanes con “La caridad como virtud y práctica, a través de mediadores formales e informales. Barcelona, siglo XV”; Rafael Gaune, “Andrés de Rada: jesuita, visitador y ladrón de libros, siglos XVII-XVIII”; Olaya Sanfuentes, “Piedras y retablos sagrados. Circulación de imágenes de Santiago Apostol en el mundo andino"; Carolina Odone, “San Antonio de Padua en las cajas de madera de las iglesias de San Pedro Estación: Miradas a la circulación de creencias, saberes y memorias (Cuenca San Pedro-Inacaliri, II Región, Chile); Lucrecia Enríquez con “Clero mapuche” y Ana María Stuven con “La Encíclica Quanta Cura y el Syllabus de SS Pío IX: una lectura desde el debate político chileno”.
INFORMACIÓN PERIODÍSTICA
Violeta Bustos, Dirección de Comunicaciones, vsbustos@uc.cl