Psicóloga UC publica investigaciones inéditas sobre identidad de género infantil

En Chile aún no existe una ley de identidad de género, menos aún ha sido profundamente explorado el tema aplicado a la infancia. La académica de la Escuela de Psicología Ximena Muñoz es la primera autora de un estudio científico sobre el tema. Por estos días, la profesora ha dado a conocer dos nuevas investigaciones que exploran, el vínculo paterno con los niños varones que presentan una identidad de género femenina,  y el desarrollo infantil en comparación con niños con identidad de género acorde al sexo.

“La identidad en general se construye a lo largo de la vida y la identidad de género también”, explica la especialista. Sin embargo,  aclara que es en los primeros dos años cuando se evidencian las primeras señales respecto del género con el que se siente identificado el niño.

Los estudios fueron presentados en el contexto del “XVI Congreso Latinoamericano de Rorschach y otras técnicas Proyectivas y el I Congreso Chileno en Psicodiagnóstico y Pruebas Proyectivas”. Muñoz dio a conocer los resultados de sus investigaciones que contaron con muestras cercanas a unas 50 personas divididas en grupos: uno con identidad de género acorde al sexo y otro con identidad de género no concordante con el sexo. Todos los miembros del estudio participaron con consentimiento informado y realizaron test psicológicos.

“El padre tiene importantes dificultades para ejercer sus funciones paternas”, en el caso de niños con identidad de género no acorde al sexo, explicó la especialista para referirse a una de las principales conclusiones de uno de los estudios. Agregó que este modo de funcionamiento ha sido denominado disforia y se refirió a los indicadores que pueden reflejar este modo de funcionamiento en los más pequeños.

Algunas de las señales, explicó Muñoz, son que por ejemplo el niño no quiera hacer las actividades propias de su sexo y edad de manera sistemática, que rechace su propio cuerpo o que diga que él cuando sea grande va a ser de otro sexo.

Sin embargo, enfatizó en que estas señales no son suficientes para dar cuenta de este modo de funcionamiento. “Hay que hacer un buen psicodiagnóstico. Puede que un niño quiera jugar con muñecas, pero no es sinónimo de lo que se ha denominado disforia. Lo mismo si el niño dice que quiere ser niña, no basta”, aclaró. 

Por esto, señaló, es importante contar con un especialista que entienda el tema, pues algunas conductas o afirmaciones de los niños pueden ser confundidas con la presencia de una identidad femenina en él niño, cuando realmente puede tratarse sólo de algo circunstancial y temporal.
 

 INFORMACIÓN PERIODÍSTICA

Violeta Bustos Vaccia, periodista, vsbustos@uc.cl