Ignacio Sánchez destaca la importancia de la familia en la educación
El rector sostiene que la familia es la primera escuela donde se recibe la formación para la justicia y la paz, en un texto de opinión publicado por el diario La Tercera.
“La familia es la célula social más pequeña e importante, una institución fundamental para la vida de toda sociedad y, como tal, tiene un rol clave en la educación”, asegura el rector Ignacio Sánchez, en una columna difundida hoy por La Tercera.
Sobre esa premisa, desarrolla una argumentación donde pone énfasis en la familia como el primer lugar de aprendizaje. En ella se cultiva el respeto y se construyen los valores para una convivencia constructiva y pacífica, se recibe y cultiva la fe, se aprende la solidaridad entre las generaciones, el respeto, el perdón y la acogida del otro. Además, sostiene que es la primera fuente de hábitos en relación al conocimiento, lo que posteriormente determinará el camino de los estudiantes.
Destaca también cómo los padres comparten su misión educativa con otras personas e instituciones, abriéndose al aporte de la sociedad. “Debido a que los padres no son capaces de satisfacer por sí solos las exigencias de todo el proceso educativo, el principio de subsidiariedad completa con los procesos educativos formales al amor paterno y materno, ratificando su carácter fundamental”, afirma.
Ignacio Sánchez reflexiona sobre cómo los recursos familiares son determinantes en los primeros años, donde se desarrollan las capacidades de aprendizaje. “La pobreza familiar en la infancia, no sólo tiene que ver con menores bienes materiales o con la ingesta de menos nutrientes, sino que afecta otras áreas, en especial al desarrollo de la cultura e interés por aprender”, explica.
“Su falencia determina pobreza en edad temprana de la familia. Es la pobreza más crucial, aquella que tiene el efecto más duradero y que se va a traspasar a la siguiente generación. De esto se desprende la importancia de la educación inicial en la familia”, apunta.
Por la íntima relación que existe entre la educación pre escolar recibida y el capital social de los jóvenes, la máxima autoridad de la UC subraya la importancia de fortalecerla. Por eso, celebra que los recursos obtenidos a través de la reciente reforma tributaria se destinen especialmente a esta etapa de la formación. “Significa un gran apoyo y estímulo para cada familia”, agrega.
Además, indica que la familia debe ser la primera en procurar que las leyes y las instituciones estatales defiendan sus derechos. “La familia debe crecer en la conciencia de ser protagonista de la construcción de la llamada ‘política familiar’ y asumir así la responsabilidad de transformar la sociedad”, asegura.
Según el rector, la familia junto a la sociedad –a través de la Iglesia, fundaciones y privados— y el Estado –por medio de una educación pública de calidad, al alcance de todos— conforman los tres pilares esenciales en la formación de niños y jóvenes. “La familia y la sociedad, con la protección del Estado, tienen una función complementaria en la defensa y en la promoción del bien de todos los hombres y de cada hombre. Entenderlo así es una gran oportunidad para cada una de nuestras familias”, concluye.