Los premios nobeles de Economía 2019 y su estrecho vínculo con la UC
Investigadores del centro J-PAL del MIT, cuya oficina latinoamericana está en el Instituto de Economía de la UC, acaban de ser galardonados con el Premio Nobel de Economía 2019 por su aporte al combate contra la pobreza.
Fue hace diez años cuando la economista del MIT, Esther Duflo, telefoneó a Francisco Gallego para encomendarle una misión: crear la oficina latinoamericana de J-PAL (Poverty Action Lab) en la UC y desde acá hacer investigación que permita avanzar en la reducción de la pobreza a través de políticas públicas informadas.
Ambos se conocieron durante los estudios de postgrado del actual profesor del Instituto de Economía —Esther era una reconocida académica de origen francés—pero nada indicaba que la experta lo llamaría en 2009 para encargarle tremendo desafío.
Desde entonces, esta oficina ha emprendido proyectos en decenas de países de Latinoamérica y el Caribe, ha extendido el número de profesores afiliados que desarrollan sus investigaciones en la región, y ha capacitado a miles de profesionales del sector público y privado.
"Estoy muy satisfecha con el trabajo efectuado aquí en la UC. En este tiempo hemos realizado muchos proyectos, y aún hay más por hacer. Latinoamérica presenta numerosos desafíos", sostuvo al periódico Visión, Esther Duflo, durante su visita en 2015 por los cinco años de la oficina de J-Pal en la UC.
Duflo es la actual ganadora del Premio Nobel de Economía junto a Abhijit Banerjee (M.I.T.) y Michael Kremer de la U. de Harvard. La razón que esgrimió la Academia Sueca fue que estos académicos "han dedicado más de 20 años de investigación económica al desarrollo de nuevos caminos y ayudas para combatir la pobreza en el mundo".
La sede en la UC
Para lograr la gran misión de J-PAL, esto es, reducir la pobreza en el mundo garantizando que las políticas públicas de organizaciones de todo tipo estén informadas por evidencia científica, se han definido tres áreas de trabajo: una en donde los investigadores evalúan los programas y políticas sociales de todo el mundo para determinar cuáles funcionan y cuáles no; otra en que estos mismos expertos capacitan a los encargados de estas políticas públicas; y un área que difunde los resultados, y en donde se trabaja con todo tipo de entidades para, entre otras cosas, promover la evaluación.
La sede latinoamericana en la UC —hay otras en África, Europa y dos en Asia, además de la oficina global en el MIT—cuenta con una cantidad importante de profesores afiliados de las más prestigiosas universidades, quienes han desarrollado cientos de evaluaciones en este lado del mundo.
Una de ellas pertenece a la académica chilena Claudia Martínez y trata sobre el impacto de la información temprana en estudiantes que terminan su educación básica. Publicado en The Review of Economics and Statistics, este proyecto de más de tres años de trabajo mostró que informar a tiempo a los estudiantes sobre las posibilidades de becas y créditos para la educación superior, puede influir en su desempeño escolar, incrementando su asistencia a clases y su inscripción a escuelas científico humanistas, que les prepararán para entrar a la universidad.
«Nos encantaría tener más evaluaciones en la región para enfrentar nuevas temáticas de interés para el desarrollo en América Latina. (Y esto) para avanzar a pasos más seguros en la existencia de políticas públicas que se implementen y que estén informadas con sólidas bases empíricas», dijo el profesor Gallego, quien relata que no todo ha sido tan simple en estos años de trabajo como director científico de este centro ubicado en la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la UC.
No ha sido fácil “transmitir que es mucho menos lo que sabemos en términos científicos de políticas públicas exitosas que lo que la gente cree. Es difícil que te pregunten qué hacer en políticas públicas y tu respuesta sea que sabemos poco”, señaló.
Parte de este artículo fue publicado en la página 14 de la edición de abril de 2015 del periódico Visión. Ver aquí.