Decano de Química y de Farmacia: «Veo con mucho optimismo el desarrollo de la facultad»

Tiene más de dos décadas de trayectoria en investigación y docencia. Mario Aranda es el primer académico de la Escuela de Química y Farmacia en asumir como decano, tras obtener la mayoría de votos en la elección de abril.

En los últimos dos años, se desempeñó como director de Investigación y Posgrado de la Facultad de Química y de Farmacia, siendo parte del equipo del saliente decano Alejandro Toro Labbé, con quien trabajó codo a codo. «Me entrega una facultad que está muy ordenada», dice a Visión UC desde su oficina, en donde una pizarra llena de fórmulas se roba las miradas.

«Veo con mucho optimismo el desarrollo de la facultad en estos próximos cuatro años», agrega con una amable sonrisa. El nuevo decano busca darle continuidad a la gestión realizada por su predecesor, particularmente, a la visión de mantener «excelencia en todo el quehacer» de la facultad: en docencia de pre y postgrado, investigación, asistencia técnica y extensión. «Es decir, en todo el quehacer académico la idea es que estemos en el segmento de la excelencia», explica. Y desde este lugar han trabajado fuertemente para eso. El programa doctoral de química, que tiene más de 50 años y cuenta con más de 260 egresados, fue acreditado por ocho años. Y actualmente se está trabajando también en el proceso de certificación de las carreras de pregrado.

«Si tenemos personas felices, lo más probable es que tengamos personas realizadas» - Mario Aranda, nuevo decano Facultad de Química y de Farmacia

Pertenencia y comunidad

La misión de la Facultad de Química y de Farmacia ha y cultivar las ciencias químicas y farmacéuticas, buscando la excelencia y rigurosidad académica en la docencia, en la investigación, extensión y vinculación con el medio. Estudiantes, académicos, funcionarios y profesionales han contribuido a esto, por eso, el decano Aranda es claro en una cosa: «Esta será una administración de continuidad centrada en las personas», pues, tanto para él como para el ex decano, las instituciones las hacen las personas.

Para el decano, el bienestar de las personas y su integración inciden, en consecuencia, en el desarrollo de la facultad. «Si tenemos personas felices, lo más probable es que tengamos personas realizadas. Y si tenemos personas realizadas, la facultad crece. Y si la facultad crece, la universidad crece también. Ese es más o menos el timeline que tenemos», explica con cordialidad.

Quitar incertidumbre

La Facultad de Química y de Farmacia ha buscado desarrollar nuevos espacios académicos con vista al trabajo multidisciplinar, innovador y, por sobre todo, al servicio de la sociedad y del país. El sentido de innovación ha hecho a la facultad un referente latinoamericano, tanto en la formación de estudiantes como en la generación de nuevo conocimiento, contribuyendo activamente desde las ciencias químicas y farmacéuticas al desarrollo social. 

Otro de sus afanes es potenciar el sentido de comunidad. Un paso para ello es la creación de una intranet que estará operativa en los próximos meses, poniendo a disposición todas las actas de nuestros organismos colegiados. «Esto favorecerá la inmediatez y el acceso a la información con los documentos oficiales de la unidad», especifica.

En esa línea «nuestra idea es ir quitando la incertidumbre en los procesos, entregando certezas», con gestión y siempre con comunicación para que las personas se sientan parte de los procesos. Así, por ejemplo, dar a conocer plazos, comunicaciones o medidas como la remodelación de un laboratorio docente ayudan a intercambiar y recopilar ideas para ir haciendo comunidad.

La curiosidad abre las puertas

De origen penquista, Mario Aranda Bustos realizó su formación académica en la Universidad de Concepción, donde se licenciaría en Química y Farmacia, se titularía de químico farmacéutico y donde realizaría, además, un magíster en ciencias farmacéuticas. Trabajó como farmacéutico en el mundo privado. Y la curiosidad siguió llevándolo por el camino de la investigación. Así se convirtió en doctor en Ciencias en Química de Alimentos, con la máxima distinción summa cum laude de la Universidad de Hohenheim, Stuttgart, Alemania, considerada una de las mejores universidades dentro de su área.

«Sería bonito ver que, cuando acabe mi periodo, vea que la facultad está mucho mejor que cuando llegué» - Mario Aranda, nuevo decano Facultad de Química y de Farmacia

Las modernidad y calidad de las dependencias de la universidad alemana lo hicieron soñar con forjar algo similar en Chile. Y lo hizo, a través de la Universidad de Concepción por casi 20 años. Como bromatólogo –estudioso de los alimentos– centró su investigación en el estudio de moléculas bioactivas presentes en plantas, alimentos y microorganismos, tanto beneficiosas como perjudiciales para la salud humana. Ha participado en cerca de 100 publicaciones y 47 proyectos de investigación.

Hacer crecer a la Facultad de Química (así llamada entonces) en docencia de pregrado y generar nuevos programas doctorales, entre otros, fue la gran tarea que aceptó cuando llegó a la UC, hace cuatro años. Ahora como decano asume nuevos desafíos. «Sería bonito ver que, cuando acabe mi periodo, vea que la facultad está mucho mejor que cuando llegué», dice. «Logrando eso, teniendo personas realizadas, con mejor infraestructura, mejores y nuevos programas de doctorado y de pregrado, sentiré que la labor está cumplida. Y ahí le diría al exdecano: tarea cumplida».

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