Columna del Rector: Programa Familiares Cuidadores
El cuidado de un familiar, particularmente para quien trabaja fuera de la casa, conlleva un cambio en el hogar, donde pueden generarse problemas de alcance personal, familiar y social. En la Universidad Católica, “hemos querido acompañar a la familia en la enfermedad a través de este programa que está en línea con nuestros objetivos y que ha contribuido de manera importante al bienestar de los miembros de nuestra comunidad”, sostiene el rector.
El aniversario de los diez años del Programa Familiares Cuidadores UC ha sido una fecha propicia para celebrar lo realizado en estos años. A esta iniciativa se refiere el rector en una columna que publica el jueves 18 de abril El Mostrador. En ella señala que el programa partió como un piloto bajo el liderazgo de la Escuela de Enfermería, junto al Departamento de Beneficios del Personal. El cuidado de un familiar, particularmente para quien trabaja fuera de la casa, conlleva un cambio en el hogar, donde pueden generarse problemas de alcance personal, familiar y social.
La evidencia científica demuestra que los familiares cuidadores que trabajan presentan un mayor índice de problemas de salud física y mental que aquellos que no lo hacen. Los problemas que se presentan son el estrés, angustia, agobio, insomnio, y sentimientos de culpa, entre otros. Hay también entre los trabajadores a cargo del cuidado de un familiar un mayor ausentismo laboral.
El cuidado de un familiar adulto mayor suele ser una actividad duradera en el tiempo que produce cambios en el contexto familiar, y puede llegar a afectar la salud del familiar cuidador, quien además cumple labores fuera del hogar, viéndose enfrentado a problemas de salud, psicológicos, emocionales, de índole social y financieros. Por medio de este programa - apunta el rector en el texto- hemos querido aportar al bienestar tanto de quienes requieren de cuidado como también de quienes forman parte de nuestra comunidad universitaria y se ven enfrentados a desempeñar este doble rol de familiar cuidador y funcionario. El programa está diseñado para entregarle al familiar cuidador los conocimientos que le permitan prevenir problemas de salud y a la vez promover en ellos un estilo de vida saludable. Así, el programa “Familiares Cuidadores Funcionarios UC” busca que el trabajador pueda compatibilizar de forma saludable la doble función de trabajador y cuidador.
A lo largo de los años, comenta Sánchez, el programa se ha ido nutriendo de diagnósticos participativos anuales y su diseño se ha ajustado a las necesidades de cada grupo de participantes. “Si bien el programa estuvo orientado y se ha ofrecido en primera instancia a los funcionarios de la planta administrativa, de manera progresiva se ha ido abriendo hacia el personal profesional y académico”, sostiene.
El programa está compuesto por cuatro áreas: la capacitación, que incluye el curso-taller “Mejorando mis habilidades para cuidar y cuidarme”. Este curso-taller pretende fortalecer y desarrollar nuevas habilidades de autocuidado y del cuidado del familiar. A través del curso, los asistentes abordan áreas tan diversas como alimentación saludable, higiene del sueño, y comunicación asertiva. De igual forma se les orienta para que puedan levantar redes familiares y sociales, además del manejo de la ansiedad y el estrés, entre otras temáticas. Un segundo componente es el acompañamiento, ya que el curso intenta dar respuesta a las necesidades más específicas del grupo de participantes, y les brinda apoyo oportuno en aspectos propios del cuidado de sus familiares.
El tercer componente es el contacto con la comunidad “Familiares Cuidadores UC”, formada por los egresados del programa, y que tiene por finalidad generar un espacio donde los funcionarios cuidadores puedan encontrar apoyo emocional e instrumental, por medio de la vinculación con sus pares y la universidad. Finalmente, el programa también incluye asesoría profesional, la que se entrega a través de una red virtual de profesionales de la UC que dan asesoría técnica sobre problemas relacionados al binomio funcionario “cuidador-familiar dependiente”, en temas legales, médicos, y cuidados específicos, entre otros. En resumen, el programa se trata de una iniciativa integral, preocupada de los diferentes ámbitos que involucra el cuidado de un familiar para quienes además trabajan.
“En nuestro Plan de Desarrollo institucional nos comprometimos a trabajar por el crecimiento de una comunidad en que todos sus miembros pudiesen alcanzar su plenitud como persona y luego reiteramos nuestro compromiso de dar amplias oportunidades y estímulos para el desarrollo de quienes conforman nuestra comunidad y favorecer así la calidad de vida de nuestras familias”, señala. Y agrega: “Enfrentar la enfermedad de un ser querido no es fácil. En la Universidad Católica, hemos querido acompañar a la familia en la enfermedad a través de este Programa que está en línea con nuestros objetivos y que ha contribuido de manera importante al bienestar de los miembros de nuestra comunidad”.
La Escuela de Enfermería, el Departamento de Beneficios del Personal, los académicos de las Escuela de Medicina, Trabajo Social y Psicología, “merecen el reconocimiento de haber participado en estos años en las labores docentes y prácticas de este programa, en el que a la fecha ya hay ciento setenta personas que hoy forman parte de la comunidad de egresados”, afirma Sánchez. Se reconoce también en forma especial el permanente patrocinio que nos ha dado el Centro colaborador de la Organización Mundial de la Salud en Atención Primaria de la Escuela de Enfermería.
Según advierte el rector, el cuidado de los familiares representa el amor en la casa, que se expresa con nuestros seres más queridos. “La posibilidad de la UC de realizar este programa para los miembros de su comunidad es una gran oportunidad de llevar a la práctica el deseo de construir comunidad. Este programa se construye con lo que está más íntimamente ligado a nuestro corazón, es decir el cuidado de la familia y sus integrantes”, manifiesta.
Programa Familiares Cuidadores UC