"El financiamiento de la educación superior debería discutirse en un próximo gobierno"

El rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, tiene un respiro al final de un arduo día para dar una entrevista.

Ha estado involucrado en múltiples temas. La visita que el Papa Francisco realizará a la universidad durante su paso por Chile; las primeras sesiones del Foro Universitario, que creó la casa de estudios con participación de académicos, funcionarios, estudiantes y ex alumnos, y claro, el cierre del año universitario.

Una de sus preocupaciones es el avance del proyecto de reforma a la educación superior que se debate en el Parlamento. Dice que la iniciativa ha pasado de períodos de estancamiento a etapas de "legislación febril", lo que no es positivo.

-¿Cuál es su análisis del avance de la reforma educacional?

"El proyecto de reforma hoy está en análisis en la comisión de Educación del Senado. Ha mejorado algunos aspectos, pero mantiene otros que son muy complejos. El primero, la definición de lo público. Lo público no puede quedar solo restringido a lo estatal, al tema de propiedad. Tiene que ver con la entrega de bienes públicos a la sociedad en educación y existen indicadores que tienen que ver con calidad, investigación, atención a estudiantes vulnerables, con impacto en el país y en la región. Hay una institucionalidad nueva que marca este proyecto, con nuevos organismos reguladores, como la creación de una subsecretaría, una superintendencia y una agencia de calidad. Son tres aspectos positivos, sin embargo, bajo este marco se puede afectar severamente la autonomía universitaria a través de una hiperregulación y control del Estado del sistema de educación superior".

-La definición del sistema de admisión también ha generado críticas de los rectores.

"El sistema de admisión ya no dependerá de un ente externo al ministerio, sino que pasa a formar parte de la subsecretaría de Educación Superior. No solo desde la Universidad Católica se ha dicho que esto no es aceptable, lo ha dicho el Consejo de Rectores en su totalidad. Las mejoras que necesita el sistema no pasan por centralizar en el ministerio. En eso hay un consenso".

-¿Qué espera de lo que pueda resolver el Senado?

"El proyecto es muy complejo. En el Senado se han recogido más las críticas que no se tomaron en cuenta en la Cámara. No sabemos qué van a hacer los senadores respecto de estas críticas. Nuestra propuesta es: centrémonos en la nueva institucionalidad y en el aseguramiento de la calidad. Y dejemos el tema del financiamiento para marzo, independiente del gobierno que sea. El financiamiento de la educación superior debería discutirse en un próximo gobierno. Porque si se va a evaluar todo, necesariamente vamos a legislar a la carrera en lo que queda de diciembre y enero".

-¿Por qué considera necesario separar los debates?

"Porque el tema del financiamiento es complejo, es preciso definir cuál será el aporte a las instituciones, cómo se dará el financiamiento estudiantil respecto a la gratuidad, cuál es su avance y la regulación de aranceles. ¿Qué pasa con los estudiantes que no están en gratuidad? ¿Cuál es la tabla que se propone, va a permitir el desarrollo de las instituciones? Si las instituciones quedan atadas a un presupuesto cerrado, se puede restringir el crecimiento y la calidad del proyecto educativo".

-¿Teme que se privilegie en cuanto a recursos a las universidades estatales?

"Como UC siempre hemos estado de acuerdo con que las universidades estatales se fortalezcan. Nos parece que es importante que sean de buena calidad tanto en Santiago como en regiones. Pero ese apoyo no debería ser en desmedro del resto del sistema universitario. Particularmente de instituciones que han estado por más de 60 años construyendo juntas el sistema universitario a través de su aporte en el CRUCh".

-¿En qué posición queda el CRUCh en el proyecto de educación superior?

"El proyecto, originalmente, era bastante vago respecto de cómo se le pensaba apoyar y qué roles se le pensaba pedir. En la indicación sustitutiva le pone un rol nuevo y destacado, se habla de condiciones para que nuevas instituciones puedan entrar al Consejo de Rectores. Pienso que el CRUCh debe ser más amplio y más diverso, con nuevas instituciones que por pertinencia y calidad puedan ingresar. Eso le hace bien al país. Está muy bien que haya un grupo que por la calidad y por su tradición forme parte de la columna vertebral de las instituciones universitarias".

-¿Qué espera de un próximo Presidente de Chile en educación superior?

"Creo que hay columnas vertebrales que son claves. Una nueva institucionalidad que deje en claro el marco regulatorio y un adecuado aseguramiento de calidad. Si tuviéramos eso establecido, sabríamos a qué instituciones otorgarles recursos. Sabríamos a qué estudiantes entregarles recursos de gratuidad porque van a instituciones que ofrecen seguridad, y no a instituciones que no tienen estándares mínimos para entregarles recursos públicos. Sabríamos a qué estudiantes ofrecerles becas y créditos. Creo que esas dos columnas no pasan por el financiamiento, sino por un nuevo ordenamiento del sistema".

-¿Cómo califica el rol que ha tenido el CRUCh en esta discusión?

"No se ha trabajado en conjunto con los rectores. Desde que se presentó por primera vez el proyecto de ley fue una decepción grande, porque mostró aspectos que habíamos discutido muchas veces y en los que planteamos que no era bueno ir por ese camino".

-¿Ha faltado interlocución con la ministra Adriana Delpiano?

"La ministra siempre ha estado disponible, pero para sacar adelante los proyectos no basta con tener reuniones esporádicas. Hay que tener reuniones de trabajo, formar comisiones de trabajo conjuntas. Probablemente, la ministra ha estado con muchos temas. Con ella hemos tenido encuentros muy distanciados".

INFORMACIÓN PERIODÍSTICA

Por Gabriel Pardo, periodista El Mercurio