Sinodalidad: proceso de renovación y esperanza para ser una Iglesia más coherente y comprometida
El pasado 20 de marzo se desarrolló en la Universidad Católica de Chile, un encuentro abierto en el que el Subsecretario de la Secretaría General del Sínodo, Mons. Luis Marín de San Martín habló sobre la Sinodalidad en la Iglesia de Hoy. Tras finalizar su visita al país, el obispo destacó que en Chile constata una Iglesia viva, que camina y que sabe superar las dificultades.
Cerca de 200 personas, tanto del laicado, como de la vida religiosa, además de sacerdotes y obispos; se hicieron parte del conversatorio organizado por la Universidad Católica de Chile, la Conferencia Episcopal y la Conferencia de Religiosas y Religiosos del país. La actividad vino a concluir una serie de encuentros en los que participó Mons. Marín en vista a animar el Sínodo y conocer más de cómo se está viviendo la sinodalidad en el país.
Al iniciar su intervención, el Subsecretario del Sínodo señaló que experimenta la sinodalidad como una oportunidad de la gracia de Dios para vivir de forma coherente nuestra fe. “Es un momento de renovación y de esperanza para la Iglesia que nos implica a todos” pues a su parecer “necesitamos una Iglesia más coherente, más comprometida”. Agregó que de lo compartido en otros lugares y en Chile, la sinodalidad “ha sido una experiencia de vitalidad de la Iglesia. La iglesia, sin duda alguna, no es un museo de arqueología. Es un organismo lleno de vida. La iglesia está viva y yo lo he sentido así”.
Enfatizó que la Iglesia es y siempre ha de ser sinodalidad, pues “es una dimensión constitutiva de la Iglesia”, añadiendo que “no es una invención del Papa Francisco” ni una moda que se terminará con el paso del tiempo, enfatizando que tal como la comunión y la misión, “la Iglesia siempre será sinodal”.
Luego Marín de San Martin habló sobre lo qué significa "caminar juntos", explicando que. así como el caminar hace referencia al "dinamismo de la fe cristiana", el concepto juntos", nos refiere a la comunión en Cristo: "No hay Cristo sin lglesia, ni llesia sin Cristo. La fe cristiana es comunión", enfatizando que no se puede ser cristianos si no estamos unidos a Cristo y tener la experiencia de Cristo: "La Unión con la experiencia de Cristo nos lleva a unirnos como iglesia".
"La Iglesia, sin duda alguna, no es un museo de arqueología. Es un organismo lleno de vida. La iglesia está viva y yo lo he sentido así” - Subsecretario de la Secretaría General del Sínodo, Mons. Luis Marín de San Martín.
Además, el obispo planteó algunas formas y modos de concretar la sinodalidad, como, por ejemplo: el Sínodo de los obispos, el Consejo pastoral, el Consejo parroquial, el Consejo de consultores, los capítulos de los religiosos. “Por tanto, lo que quiere el Sínodo de los obispos es ayudarnos a vivir esta sinodalidad, esta dimensión constitutiva de la Iglesia. Pues el Papa dice cuál es el tema del Sínodo, que no es tratar todo como un cajón de sastre donde hablamos de todos los temas. No, el tema del Sínodo de los obispos es muy claro, por una iglesia sinodal, comunión, participación y misión”.
Monseñor Marín resaltó que la sinodalidad es un proceso que comienza desde abajo y a través de la escucha con tres características fundamentales: lo experiencial, lo espiritual y lo comunitario, relevando que “tenemos que abrirnos al Espíritu Santo, a la oración, a la escucha” y agregando que Lo que estamos buscando es discernir cuál es la voluntad del Señor para cada uno de nosotros, para la comunidad cristiana, para mi grupo” y preguntarse ¿En este momento de la historia, qué nos pide el Señor?
Mons. Marín también explicó que el Papa Francisco ha convocado a este proceso sinodal para implicar a toda la Iglesia, con el objetivo de discernir la voluntad de Dios para este tiempo. Un proceso que se basa en el escuchar, discernir y decidir.
También, el subsecretario del Sínodo recalcó que la sinodalidad no se puede entender desde los parámetros del poder ni una democracia parlamentaria, sino que se trata de una forma de ser Iglesia, basada en la escucha, el discernimiento y la corresponsabilidad. “La sinodalidad implica a todos los miembros del Pueblo de Dios, cada uno según su vocación".
También relevó que no se puede perder de vista que la finalidad del proceso sinodal es la evangelización. “Se trata de llevar el Evangelio a este tiempo y a todas las culturas”, agregando que la sinodalidad es una propuesta de esperanza que requiere la colaboración de todos.
Rector Sánchez llama a la comunidad universitaria a sumarse al camino sinodal de la Iglesia
El rector Ignacio Sánchez, al dar inicio a la actividad, destacó la importancia de este camino para la Iglesia y la Universidad.
Citando al papa Francisco, el rector recordó que “La sinodalidad es un llamado al dinamismo, a la escucha mutua, llevado a cabo en todos los niveles de la Iglesia, implicando a todo el pueblo de Dios”, agregando que “es un llamado a caminar juntos como bautizados, en la diversidad de carismas, vocaciones y ministerios”.
La autoridad académica también se refirió a los desafíos que enfrenta la Iglesia en este camino sinodal, entre ellos la necesidad de una mayor participación de la mujer y la búsqueda de respuestas a los problemas del mundo actual. También valoró que es un momento para el encuentro “a partir de las diversas realidades que se viven en la Iglesia, desde la realidad diocesana de vida consagrada, laical, clerical y también familiar”.
El rector Sánchez también abordó la relación entre la sinodalidad y la universidad, señalando que la Universidad Católica está comprometida con este camino y que busca contribuir a la formación de una generación de personas, sean creyentes o no creyentes, que sean capaces de construir una sociedad más justa y fraterna.
“Nosotros experimentamos la realidad de contextos cada vez más multiculturales y multi religiosos, en los que es esencial el empeño por el diálogo entre religión y cultura, así como de diversos grupos que constituyen la sociedad. De esta manera, vivir la misión de la Iglesia en estos contextos requiere claramente un estilo de presencia, servicio y anuncio que construya puentes, cultive la comprensión recíproca y se empeñe en una evangelización que acompañe, escuche y aprenda especialmente”.
Gran Canciller Fernando Chomali: La Iglesia en Chile avanza en la escucha y la colegialidad en la toma de decisiones
Por su parte, el Arzobispo de Santiago y Gran Canciller UC, Fernando Chomali; abordó los avances y desafíos de la Iglesia chilena en este camino sinodal, poniendo énfasis en la necesidad de una renovación en la pedagogía evangelizadora y en la promoción de las vocaciones sacerdotales.
En ese sentido, Mons. Chomali destacó que la Iglesia chilena ha avanzado en la implementación del método sinodal, caracterizado por la escucha, el discernimiento y la toma de decisiones colegiadas. “Hemos ido avanzando significativamente para que la toma de decisiones sea colegiada y así evitar el llamado clericalismo, lo cual sin lugar a duda que es un avance”. Señaló que este método se está aplicando en capillas, parroquias y universidades, lo que ha permitido una mayor participación de los fieles en la vida de la Iglesia.
Sin embargo, Fernando Chomali relevó que esto se da en medio de una sociedad culturalmente católica, pero cada vez menos evangelizada, por lo que hizo un llamado a renovar la pedagogía evangelizadora para hacerla más atractiva a las nuevas generaciones.
El Presidente del Episcopado también compartió su preocupación por la falta de vocaciones sacerdotales en Chile, destacando que en más de 30 años de sacerdocio, ningún joven le ha preguntado por el significado de ser sacerdote. Por eso, hizo un llamado a reflexionar sobre la necesidad de presentar el sacerdocio como una opción vocacional atractiva y significativa.
Finalmente, Mons. Chomali también se refirió a la importancia de la labor social de la Iglesia, especialmente en la atención a los más pobres, teniendo siempre presentes la promesa de Jesús de estar con su Iglesia hasta el fin de los tiempos.
Fuente: Conferencia Episcopal de Chile