Vidrios y espejos en el arte virreinal surandino se exponen en el Centro de Extensión
La 14ª muestra de la Colección Gandarillas, que se extenderá entre el 14 de marzo y el 19 de julio, aborda el uso material y simbólico de este material en diversas piezas.
Las superficies transparentes y reflectantes han despertado el interés del hombre desde sus orígenes. La historia de vidrios y espejos ha estado marcada por lecturas bivalentes: se lo relaciona con los maravilloso, el bien y la divinidad, y al mismo tiempo, con la vanidad, el egoísmo y la avaricia. Virtud, por un lado; pecado y perversión, por el otro.
El estudio material y simbólico de estos materiales presentes en la Colección Gandarillas será el foco de la muestra que se abrirá al público el 14 de marzo próximo en el Centro de Extensión de la Casa Central UC. Trece piezas conforman la exposición, entre ellas, pinturas de gran formato de la Virgen María, espejos tallados y pequeñas piezas que representan la crucifixión. En cada una de ellas los cristales cumplen alguna función.
“Brilla la mirada del Niño bajo la forma envolvente de su fanal (estructura de vidrio de forma elipsoidal o cupular), que multiplica transparencias y reflejos (….). Jesús exhala su último suspiro amplificado por sus vidriados ojos (….). Espejo de virtudes y perfecciones, la Virgen María se ofrece a la gracia divina y deviene su reflejo indeleble”, describe Isabel Cruz, curadora de la colección, en el artículo que sustenta la muestra.
“El vidrio está presente en toda nuestra vida cotidiana y además tiene una importancia enorme en todas las artes y en todas las ciencias. Los procesos de calidad del vidrio han permitido lograr cada vez mejores imágenes y grandes avances en la exploración del universo”- Isabel Cruz, curadora de la colección
La historiadora del arte explica que el objetivo de la exposición es mostrar la importancia simbólica y la importancia práctica del vidrio a través de las distintas piezas. “El vidrio ha potenciado a través del tiempo la vivencia de lo sagrado, el misterio y la majestad, el culto y el ritual”, sostiene. Y agrega que hoy la gente desconoce el largo proceso histórico que involucró la elaboración de vidrios y espejos cada vez más puros. “El vidrio está presente en toda nuestra vida cotidiana y además tiene una importancia enorme en todas las artes y en todas las ciencias. Los procesos de calidad del vidrio han permitido lograr cada vez mejores imágenes y grandes avances en la exploración del universo”, plantea.
Su origen estaría en Siria y en Egipto, donde existen hallazgos de vidrios que datan de 2.500 años a.C. Luego, durante el Imperio romano, la técnica se extendió alrededor del Mediterráneo. En la Edad Media destaca el uso estético y religioso de este material en las vidrieras de las iglesias góticas. En España la fabricación del vidrio florece entre los siglos XII y XV, siguiendo el ejemplo de Venecia, donde están los mejores artesanos de Europa. Tanto en el Virreinato del Perú como de Chile, los objetos de vidrio de calidad se importaban desde este país o desde Francia.
Por ejemplo, en los ojos de cristal, presentes en las imágenes escultóricas sagradas hispanoamericanas, confluyen ciencia, tecnología y arte para conseguir el objetivo: “potenciar la vivencia de lo sagrado, la majestad, el temor y el culto inherentes a la religiosidad de la época”.
María, espejo sin mancha
También el arte virreinal surandino de los siglos XVII y XVIII recoge el símbolo de la Virgen María, paradigma de perfección, como espejo sin mancha. Su figura es representada junto a espejos que simbolizan la justicia y la pureza.
La muestra “Trasparencias: Reflejos y trascendencia” se inaugura el 14 de marzo en el Centro de Extensión y estará abierta al público en general hasta fines de julio.
“La metáfora de la Virgen María como espejo de perfección, espejo sin mancha, se constituye en ejemplo tanto de las mujeres casadas y madres cuanto de las célibes y religiosas. Como madre espiritual, María es modelo de las casadas que pueden mirarse en su espejo y poner en práctica sus virtudes consideradas propiamente marianas como la humildad, la abnegación, la disponibilidad y la caridad hacia la familia y el mundo”, sostiene Isabel Cruz.
La curadora explica que, a diferencia de muestras anteriores de la Colección Gandarillas, esta no sólo se circunscribe al uso del vidrio en el Barroco y en el arte hispanoamericano, sino que “habla sobre el arte del vidrio y la ciencia del vidrio y del espejo en general. Se hizo una revisión de la historia hasta la actualidad. Esa perspectiva no se había abordado en otras exposiciones”.
La muestra “Trasparencias: Reflejos y trascendencia” se inaugura el 14 de marzo en el Centro de Extensión y estará abierta al público en general hasta fines de julio.